«SEVILLA, SEVILLA, SEVILLA». Por Santiago Mora.
CUANDO LA ESTRATEGIA TE EXPLOTA EN LA CARA…
Nadie ponía una pega a la planificación de la temporada hasta hace un mes, pero desde entonces hasta ahora ciertas decisiones han sido desde mi punto de vista erróneas, y creo que como consecuencia nos han llevado a la eliminación.
Que tuvimos mala suerte en el sorteo es algo cierto. Que el Sevilla es y ha sido superior al Hannover en el global de la eliminatoria no lo puede discutir casi nadie. Que hoy hemos hecho ratos de buen fútbol con numerosas ocasiones creo que tampoco, y que sólo la buena puntería de los rivales en ambos partidos en sus escasas ocasiones es lo que nos ha eliminado de la competición es algo real.
Pero claro, todo lo anterior es fútbol, y un club debe intentar minimizar todos esos factores ajenos a la calidad. En esta ocasión la falta de previsión o la confianza nos ha matado.
Creo que el Sevilla (sus dirigentes) contaban con que esta eliminatoria nos llevaría a Chipre, a Bielorrusia o Macedonia, y que tocara un equipo “tan potente” ha roto los esquemas.
El Sevilla pensaba pasar con lo que había, y apurar negociaciones de lo que tiene entre manos, pero no ha sido suficiente.
Lleva todo el verano el Sevilla tras Giovanni Dos Santos; es más, hay quien dice que mañana será jugador sevillista. El Sevilla ha apurado las negociaciones para intentar sacarlo cedido y ahorrarse algún milloncillo. Ha sido una estrategia, si, pero no ha salido bien. La apuesta era apurar para ahorrar dinero pero eso ha producido perder mucho más dinero por la eliminación más la pérdida del prestigio deportivo.
Si cuentas con tres delanteros (Negredo, Kanouté y Rodri) y dos medias puntas (Del Moral y Luis Alberto), y esperas a Giovanni, lo lógico es no desprenderse de nadie hasta contar con él.
Pues no, el Sevilla vende a Rodri, y Marcelino que no convoca a Luis Alberto se presenta en este partido con dos delanteros y un media punta. Además decide meter a los dos “9” juntos y la mala suerte hace que uno de ellos se lesione cuando más falta hacía.
Todos vemos que hace falta un delantero y en el banquillo sólo está Manu del Moral, que ha estado perdidísimo y que no está para jugar de “9”. Creo que era un partido para un “ratón de área” como Rodri, pero como no estaba, por estrategia equivocada del club, el recurso ha sido poner a Fazio de delantero centro. Si en una final como la de hoy, el recurso ofensivo de la plantilla y del entrenador es ese, creo que deja en evidencia que algunas cosas han fallado.
En defensa podríamos decir algo parecido. El Sevilla ficha a un prometedor jugador, Spahic, e incorpora a Bernardo por motivos contractuales aunque el entrenador no cuenta con él.
Con Cáceres recién llegado y parece que con poca confianza del míster, y con la lesión del Bosnio, al final tienen que jugar un Alexis que no tiene nivel para este Sevilla y un Escudé que no es ni la sombra de lo que era.
Cierto es que no hemos sido un coladero, no, entre otras cosas por la endeblez del rival que apenas llegaba, pero si que se ha percibido un nerviosismo tremendo en la zaga y portería, algo que con la fuerte presión del Hannover haya hecho que hayamos estado dando numerosos pelotazos.
Hablando de nervios, es incomprensible que un portero de la veteranía de Palop haya estado tan nervioso y precipitado. Muchos de sus malos saques a compañeros se han convertido en pérdidas de balón en las inmediaciones del área.
Parecía que lo del Braga era insuperable, pero lo hemos conseguido. Algo bueno tiene todo esto, pero me niego a decirlo hoy.
¿y los viajecitos por Europa….?
