LAS TELEVISIONES INTENTAN SILENCIAR LA ORIGINAL PROTESTA DEL SÁNCHEZ PIZJUÁN. Por Bruno Sanxurxo.
El partido que disputaron el sábado el Sevilla FC y el Levante UD comenzó con media hora de retraso sobre el habitual horario de las 22:00h de la noche. Dicha demora fue acordada e impuesta a ambos clubes por la Liga de Fútbol Profesional y laSexta, canal que televisa el partido en abierto de cada jornada. La intención de ese aplazamiento no era otra que la de que laSexta pudiese emitir un programa con el post-partido del Barça-Madrid y las correspondientes ruedas de prensa de los técnicos (o sus segundos) y paso por la zona de mixta de los jugadores.
Una vez más, queda demostrado que para los que mandan en este negocio, lo más importante, prácticamente lo único que les interesa, son el FC Barcelona y el Real Madrid, así como sus entrenadores, presidentes, directivos, jugadores, novias de jugadores, representantes, portavoces… Luego de todos ellos, están los demás equipos, tratados continuamente como simples peones de una partida diseñada para que ganen siempre los mismos. Y con ello no me refiero únicamente a que la Liga BBVA, tal y como está diseñada, sólo la pueden conquistar blancos o blaugranas, sino sobre todo a todo esos hombres-bolsillo que forman el lobby generado a partir de la conversión de los clubes en sociedades anónimas.
En el instante que el árbitro Velasco Carballo decretó el comienzo del duelo del Sánchez Pizjuán, los aficionados lanzaron cientos de pelotas de tenis desde el Gol Norte, provocando tal aluvión que al colegiado no le quedó otra que parar el partido y retrasar aún más su inicio. Mientras empleados del club, recogepelotas e incluso algunos jugadores se ufanaban en despejar el terreno de juego, los Biris mostraron una pancarta que rezaba irónica: Que paren el partido, Mou está hablando, al mismo tiempo que coreaban una serie de consignas relacionadas con la indignación que despierta el injusto trato a favor que reciben Barça y Madrid en comparación al resto de clubes (¡toma eufemismo!).
La protesta realizada por el sevillismo no tuvo nada de violenta, sino todo lo contrario: fue una original manera de expresar indignación sin perjudicar a nadie. Sin embargo, qué poco la hemos visto en los diferentes programas de televisión dedicados al deporte, ¿verdad? ¿Y eso por qué?
Pues está claro. Porque a las televisiones no les interesa informar sobre una protesta que va contra ellas. Aunque no todas retransmitan fútbol, entre todas forman un lobby y todos los lobbies, no importa su clase, siguen a rajatabla aquella máxima de Cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar. Así las cosas, quién más quién menos pasó por el tema de puntillas, cuando no lo ignoró directamente o intentó tergiversarlo, como pudimos ver sin ir más lejos en laSexta.
El partido acabó (1-1) rondando las 00:30h de la medianoche, un horario excesivo, por mucho que los españoles seamos los que más tarde se acuestan en Europa. Pero aquí no pasa nada, ¿¡qué va a pasar!? Aquí mandan las televisiones y la LFP, y con ellos el Barça y el Madrid. Los demás son ninguneados y utilizados por los ricos e interesados. Menos mal que cada vez hay más indignados y menos que se callan, a la cabeza de todos ellos el Sevilla, club en el que tanto su afición como su presidente son los primeros en alzar la voz ante la injusta situación creada, aun a riesgo de ser castigados con todo tipo de represalias (¿cuántos partidos ha jugado este año el Sevilla en lunes?).
