El francés Zinedine Zidane se sincera en las páginas de ‘Monde Magazine’ y ‘France Football’ a puertas de un España-Francia y de cumplir 40 años. La otra cara de uno de los grandes del fútbol.
Se llama Zinedine Zidane y con el protagonismo obvio del España-Francia de los cuartos de final de la Eurocopa de Naciones de 2012, cumple 40 años, ya como una persona de a pie, sin vestirse de corto, sin captar toda la atención en el terreno de juego, pero eso sí, siendo el centro de atención allí por donde pasa. Uno de los grandes de nuestro fútbol que la víspera de su 40 cumpleaños se sincera con los compañeros de ‘France Fóotball’ y Monde Magazine’. Seis años han pasado ya desde que se retiró, desde que colgara las botas, desde que nos privara de su fútbol, su señorío, su magia, de ese guante que llevaba ‘cosido’ en su bota… Atrás quedó todo lo bueno que nos dejó, su recuerdo, su ‘jogo’ bonito, esos goles imposibles, esas asistencias al alcance tan sólo de los ‘dioses’ del Olimpo futbolístico. El ex jugador francés, reconoce en las entrevistas concedidas a los compañeros de ‘Mondo magazine’ y ‘France Football’ que «cuando me miro al espejo a veces me pregunto qué huella dejé realmente».
Y añade con nostalgia: «Indudablemente era más feliz sobre un terreno de juego. Era el sueño de mi vida desde que era un niño. Ahora todo es diferente, no tiene nada que ver». Afincado en España, tras retirarse del fútbol en nuestro país vistiendo la camiseta del Real Madrid, Zizou disfruta de su esposa y sus cuatro hijos, de los que uno de ellos, concretamente el mayor, parece seguir los pasos de su padre. Enzo Zidane sueña con ser futbolista y deja su impronta ya en la cantera del Real Madrid. Sobre su forma de ser dice: «Me gusta que me digan las cosas claras, mirándome a los ojos y no por detrás, sin mirarme como el jugador de fútbol que fui». Twitter: @tara11ara
