Se llama Mireia Belmonte y lleva al agua la historia de la Bella y la Bestia, con un pequeño matiz, que ella se encarga de interpretar los dos papeles, el de Bella y Bestia.
Y en el podio… ¡Mireia Belmonte! Esa es la frase repetida una y otra vez y que se está convirtiendo en algo habitual pese a lo difícil que es llegar a la cima una y otra vez. Pero esta bella sirena disfrazáda de nadadora cuando se mete en el agua, como si de la protagonista de la película Splash se tratara sigue agrandando su figura y colgando medallas de su cuello y del orgullo español.
En Budapest ha logrado plata en 1500, engalanado con su título Mundial y su triple corona en los 200 mariposa, tras el oro olímpico de 2016, el oro en el Mundial de 2017 y el oro en el Europeo. Sumando su quinta medalla en unos Mundiales y demostrando que es un referente en el deporte español como Nadal, Garbiñe Muguruza…
Porque Mireia es una perfeccionista, no tiene techo, busca la mejora diaria, con duros entrenamientos que hacen que pase más tiempo dentro que fuera del agua. Mitad mujer, mitad sirena en partes iguales, deslizándose por el agua con una técnica espectacular y rozando la perfección.
Como si del cuento de la Bella y la Bestia se tratara, Mireia Belmonte se atreve a interpretar los dos papeles ella misma, algo inédito hasta la fecha, haciendo de Bella, mujer enamorada y centrada en su vida personal, y de Bestia, esa Campeona sin fin que siempre quiere más y que regala al deporte español títulos, medallas y… su imborrable sonrisa. Gracias Mireia, Bella y Bestia.
Texto: JOSÉ MIGUEL MUÑOZ @tara11iker
Foto: Sport You
