Levante UD: Donde las dan, las toman

Escrito por Rafael Sarmiento. Creado en Number1 opina

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A mí me gusta creer que la vida acaba poniendo a cada uno en el lugar donde ser merece, pero a veces esto ocurre mucho antes de lo que se pueda imaginar. Es lo que ha pasado con el Levante, que después de su lamentable comportamiento con el Sevilla en asunto Koné, ahora la vida se la ha devuelto. O mejor Lassad, el ex del Deportivo que los dejó tirados a última hora para fichar por el Celtic de Glasgow.


La historia es sencilla. Lassad decide que no va a renovar con el Deportivo y ordena a su agente que le busque equipo. El Levante se interesa por el jugador y puja por él. La cosa se complica y desde la directiva se ponen en contacto directamente con el jugador, el cual les dice que su agente es un tal Karim Aklil y que es con él con quien han de hablar de esos asuntos. Finalmente, a ultimísima hora, el agente da el consentimiento a la operación y el Levante hace público el acuerdo. Era el último día de plazo de fichajes.

No obstante, en la sombra, sin que apenas nadie se enterase, el Celtic de Glasgow movió ficha y convenció al futbolista, el cual, a posteriori, asegura que nunca dio el visto bueno para fichar por el Levante, que eso fue cosa de su representante y que prefiere jugar en Escocia, que para seguir en España hubiese renovado con el Deportivo. Claro que también es cierto que les dijo a los dirigentes valencianos que el único interlocutor para estos temas era su representante, con lo que en el Levante actuaron bien, siguiendo las indicaciones que el propio futbolista les marcó.

Ahora, al presidente levantinista le comen los demonios del monumental cabreo que tiene. Ha dicho que se sienten estafados y engañados, que van a tomar medidas legales, que su objetivo es que esto no le pase a ningún otro club y que con la imagen del Levante no se juega.


Claro que no ha dicho nada acerca de cual es esa imagen con la que no se debe jugar. Si la de un club humilde y esforzado a quien dejan tirado a última hora, o la de un equipo que, torpeza del Sevilla aparte, dejó de alinear a su máximo goleador por una supuesta lesión que no se creyó nadie justo cuando al futbolista le quedaba por marcar un solo gol para renovar automáticamente por el club que le ha pagado religiosamente durante los tres o cuatro años que ha estado lesionado. Y también buena parte de la ficha de este que ha jugado con ellos. Lo permiten, el jugador no marca, por lo que no renueva, luego le hacen un contrato y semanas después lo venden por cinco millones.

Sinceramente, después de esto, ya digo que no sé bien que tipo de imagen pretenden conservar. No sé exactamente a qué se refieren con “sentirse engañados y estafados” cuando son ellos primeros en estafar (dentro de la legalidad) a los demás. O algo semejante. Para mí, en mi opinión, no hace falta que alguien de fuera venga a ensuciar la imagen del Levante porque ellos mismos se bastan para tal propósito con su actitud. Y a pesar de lo lamentable que me parece lo hecho por el representante de Lassad (el gran culpable de lo ocurrido por comprometerse sin el consentimiento del jugador), yo, sinceramente, me alegro de lo ocurrido. Me alegro mucho. Y no por un sentimiento de venganza ni nada por el estilo (no considero al Levante lo bastante grande como para inspirarme tal cosa), sino porque, como decía al principio, me gusta pensar que la vida pone a cada uno donde merece. Y este caso me da la razón en ese sentido.

Twitter: @Ravesen_