Afronta el Betis una semana importantísima e intensa con dos enfrentamientos, el primero el de hoy ante el Espanyol, para dar paso al más importante de los dos, el que le medirá al Racing.
Al Betis no le vale otra cosa que no sea ganar o ganar. La derrota en Vallecas del pasado sábado ha frenado la euforia levantada tras el partidazo ante el Madrid, para de esa forma devolver de golpe a los béticos al suelo, a la cruda realidad de una Liga demasiado irregular para los verdiblancos, capaces de alternar partidos de ensueño con otros regulares o como en el caso del Rayo Vallecano, mediocres. El Espanyol por su parte está realizando una gran temporada, de hecho llevan toda la temporada en la parte alta de la clasificación, casi siempre en los puestos de Europa League, ofreciendo buen fútbol y además buenos resultados cimentados en una defensa sólida y resolutiva, que han dejado un bagaje de once victorias, seis empates y diez derrotas. Además, el equipo de Pochettino llega al Benito Villamarín en su mejor momento, con dos victorias consecutivas y con un bloque cimentado que hará que las bajas obligadas por las lesiones no mermen, al menos en principio, el potencial del equipo. Incluso el propio técnico periquito se plantea hacer rotaciones ya que entiende que la buena línea del equipo y los próximos compromisos le permiten realizar cambios en el once sin que el equipo lo acuse en exceso. No estará en ese equipo Sergio García, ex bético, que no podrá enfrentarse a la que fue su afición y su equipo y del que se marchó con el descenso verdiblanco a Segunda división. Una lesión en el partido del pasado lunes ante el Racing de Santander, se lo impide. Distinto presente también para Betis y Espanyol que llegan tan separados en la actualidad como en la clasificación. Los de Mel acumulan dos derrotas consecutivas tras caer ante Madrid (2-3) y Rayo Vallecano (3-0) con imagen bien distinta en uno y otro partido. Del Cielo a la tierra en apenas siete días, los que transcurrieron de uno a otro partido.
Precisamente estas dos derrotas obligan más que nunca a los béticos a sumar y vencer para no complicarse la vida. Un triunfo ante el complicado Espanyol sería una inyección de moral importantísima para el choque del domingo que también volverá a ser en el Benito Villamarín. El Espanyol por su parte suma dos de dos en las últimas jornadas, goleada ante otro de los equipos en racha, el Rayo Vallecano (5-1) y frente al Racing de Santander (3-1), el que tras los espanyolistas será rival del equipo verdiblanco. Pepe Mel se está plateando introducir algún cambio en el once inicial, de cara a buscar la reacción en un equipo que no puede ofrecer una imagen tan distinta de un partido a otro en apenas siete días. El Betis se encuentra ante la obligación de sumar dos victorias consecutivas para poder respirar más tranquilo y afrontar la recta final del campeonato con menos presión. Y esta ante una ocasión inmejorable al disputar dos partidos de forma consecutiva en casa, el segundo de ellos ante un rival directo en la lucha por la permanencia y al que de vencerle puede dejarle muy descolgado, pero claro, para ello antes deberá ganar al Espanyol. REAL BETIS: Fabricio; Nelson, Paulao, Dorado, Nacho; Beñat, Iriney, Salva Sevilla; Jefferson Montero, Jorge Molina y Rubén Castro. ESPANYOL: Casilla; Javi López, Raúl Rodríguez, Héctor Moreno, Didac, Forlín; Baena, Weiss, Coutinho, Romaric; y Kalu Uche. ÁRBITRO: Iglesias Villanueva. ESTADIO: Benito Villamarín. HORA: 20 h. PPV Twitter: @tara11ara