Poco o nada se puede intuir cuando enfrente te espera lo que tendrá el Real Betis hoy enfrente, un equipo de estrellas, mágico y capaz de convertir el fútbol en poesía como si fuera sencillo…
Capaz de lo mejor, pero también de lo peor. Ese es el Real Betis esta temporada y siempre, el del ‘manque pierda’ que tanto gusta y que forma parte de su historia, y el que en ciertos momentos le ha impedido crecer en consonancia a esa increíble masa social que arrastra. Un Betis que no llega a este partido en su mejor momento aunque visto de otra forma, nunca es un buen momento para medirse a ese equipo de ensueño que esta mañana tendrán los verdiblancos enfrente. Un Fútbol Club Barcelona mágico, imprevisible y capaz de hacer poesía con dos elementos: un balón y un verde tapíz, qué fácil parece ¿verdad? Pero no debe serlo cuando sólo son los azulgranas los que consiguen hilvanar jugadas más propias de Oliver y Benji que de personajes reales de carne y hueso, que aunque tienen su otro yo en la playstation y la Xbox, son ellos los que manejan aquí sus acciones de forma libre y creativa como si de un pintor ante un lienzo en blanco se tratara. Por ello a nadie debe extrañar que Miki, Iker, Pablo y otros tantos y tantos niños del mundo sueñen con ser como él, como ese genio de apenas metro y setenta centímetros, y apodado la ‘Pulga’, capaz de enamorar como si del mismísimo Rodolfo Valentino se tratara. Un Messi de dibujos animados acompañado de sus amigos inseparables, el pistolero Luis Suárez y Neymar Junior, en la que sin duda es la mejor delantera del mundo por mucho tiempo.
Es la grandeza de este deporte llamado fútbol donde la talla física no va proporcionalmente repartida con el ingenio, la chispa y esas sensaciones que invitan al aficionado a levantarse de su asiento para grabar de por vida en sus retinas aquella jugada que contar a sus amigos, hijos y familia vivió en directo. Una delantera de ensueño con la MSN acompañada perfectamente por los no menos grandes Iniesta, Piqué, Mascherano, Busquets… En tierras sevillanas una historia muy distinta pero agradecida siempre, por una afición que tiene en Rubén Castro a su particular Luis Suárez, en Joaquín a su Messi y en Ceballos a un Neymar utrerano. Cada uno disfruta con lo que tiene, esa es la esencia de este Betis que quiere arrancar, con o sin manos libres, para de una vez por todas buscar esa transformación total que desde la planta noble se intenta dar en busca de unas estructuras tan importantes en toda empresa. No será un partido fácil, y el que no quiera sufrir que se quede en casa, porque será sin partido para sufrir y disfrutar, para disfrutar y sufrir, en principio en partes iguales, porque este Betis es su mejor aliado pero a la vez su peor enemigo, como si del mismísimo Doctor Jeckyll & Mister Hyde se tratara. Eso sí, si quieren saber que versión les tocará hoy disfrutar, deberán esperar a las doce del mediodía, hora ideal para con los más pequeños de la casa, presenciar un partido que pase lo que pase… dará mucho que hablar. ¡Que lo disfruten! JOSÉ MIGUEL MUÑOZ @tara11iker Foto: JOSÉ EMILIO GÓMEZ @JoseEmilioGomez
