El Real Betis Balompié se ha proclamado campeón de la Copa del Rey 2021-2022, en el Estadio de La Cartuja, tras vencer en la tanda de penaltis al Valencia con un Juan Miranda que se coronó como el héroe final.
REAL BETIS: Bravo; Bellerín, Pezzella, Bartra, Álex Moreno (Miranda 106′); Guido Rodríguez, William Carvalho (Guardado 102′); Canales (Aitor Ruibal 111′), Fekir (Tello 111′), Juanmi (Joaquín 86′); y Borja Iglesias (Willian José 102′).
VALENCIA CF: Mamardashvili; Foulquier (Musah 100′), Diakhaby, Gabriel Paulista, Alderete, Gayà; Carlos Soler, Hugo Guillamón (Racic 85′), Ilaix Moriba (Thierry Correia 79′), Hugo Duro (Bryan Gil 85′); y Guedes.
ARBITRAJE: Hernández Hernández. Amonestó a Paulista 5′, Pezzella 72′, Guillamón 74′, Alderete 92′, Correia 93′, Borja 95′, Carlos Soler 98′.
GOLES: 1-0. Borja Iglesias. Minuto 11. 2-0. Duro. Minuto 33.
NUMBER1 REAL BETIS: Borja Iglesias.
El Real Betis Balompié consiguió proclamarse campeón de la Copa de S. Majestad el Rey 2022 tras derrotar en el Estadio de la Cartuja al Valencia CF, en una tanda de penaltis de infarto en la que Yunus Musah fallo por parte del conjunto de Bordalás y donde Juan Miranda, el canterano de Olivares, la zurda mágica de Sevilla, anotó el penalti decisivo que le daba al conjunto de Manuel Pellegrini la tercera Copa del Rey de su historia.
Fue un partido bastante igualado, que de hecho terminó en empate a uno, pero en el que realmente el equipo que propuso y el que buscó la victoria desde el principio hasta el final, fue el Real Betis Balompié. El planteamiento de Manuel Pellegrini fue atrevido y valiente desde el principio, siendo dominador del juego hasta que se cumpliese aproximadamente el minuto 33 de encuentro. Antes, en el 11, Borja Iglesias ya había anotado su gol. Un remate precioso a centro milimétrico de Bellerín.
Pero a pesar del dominio bético, llegó otro de los fallos defensivos que traen de cabeza al Betis esta temporada, y Hugo Duro batió a Claudio Bravo, con una definición de un superclase, para poner el empate en el luminoso. A partir de aquí, podríamos pasar directamente a hablar de la prórroga, ya que vimos un partido igualado, en el que el Valencia no dejaba jugar, y en el que el Betis, de camino, dio dos palos y vio como Claudio Bravo salvaba la vida a los suyos en las dos únicas ocasiones del Valencia en toda la segunda mitad.
Ya en la prórroga, el Betis lo siguió intentando sin éxito ante una defensa muy cerrada y bien estructurada. Canales, Borja Iglesias y Fekir dijeron basta, y entraron jugadores de la segunda unidad. Tello, Aitor, Guardado, Miranda y Willian José. Si se tratase de otro equipo, estaría justificado, pero sorprenderse de que los cinco penaltis de la tanda fuesen anotados por los cinco jugadores que entraron desde el banquillo, es de no conocer absolutamente nada de cómo funciona el equipo de Manuel Pellegrini Ripamonti. La piña.
Los nervios afloraron en la tanda de penaltis, con un Valencia que los lanzaba de forma sublime, y un Betis que no se quedaba atrás. A más de media Sevilla se le paralizó el corazón en el momento en el que Mamardashvili toca el penalti de Joaquín, pero el destino quiso que acabase entrando. Una mínima celebración vino con el fallo valencianista, pero cuando Juan Miranda anotó el quinto, La Cartuja se vino abajo. El Betis lo había hecho otra vez. El Betis es Campeón de la Copa del Rey. Un título merecido, no solo por esta plantilla, cuerpo técnico y directiva, sino en mayor medida por una afición incondicional e incansable, que no ha parado de vibrar con su equipo, en el campo del Salamanca, Llagostera, Alcorcón, Barcelona B o en Frankfurt. En las buenas y en las malas.
Evidentemente, es momento de saborearlo todo. La temporada está terminada. Con sobresaliente. Título y objetivo cumplido a falta de cinco partidos de Liga. Sólo queda soñar. Soñar con la Champions y demostrar que el hambre de esta plantilla es inmensa.
Texto: MANU COLCHON @MANU_COLCHON
Fotos: Q. Pérez-Ventana @perezventana
