El Sevilla FC vuelve a disputar la máxima competición europea, la Champions League. Tras quedar cuarto la pasada campaña y ganar la Europa League, llega el reto de conseguir asentarse en la competición de las estrellas. Atrás queda la derrota liguera, toca afrontar el cambio de chip con la máxima de las ilusiones. Para empezar, plato fuerte: el Chelsea.
El sueño de la pasada campaña se cumplió y hoy toca comenzar a degustarlo. El Sevilla vuelve a la máxima competición europea y lo hace por lo grande enfrentándose al Chelsea en Stamford Bridge. La ilusión por superar su propio techo se mantiene intacta en el equipo de Lopetegui, pese a llegar tras una derrota liguera más que merecida. Porque si algo ha demostrado el equipo del técnico vasco es saber competir a largo plazo. Un traspiés no va a trastocar los planes y menos cuando cada tres días hay una nueva oportunidad para volver a ganar. Tras batir a grandes como Manchester United, Roma, Inter de Milán y competir contra todo un Bayern de Munich ha llegado la hora de hacerlo en Champions League.
Lopetegui se ha llevado para este choque a todos los disponibles, a excepción de Koundé -que sigue en cuarentena- Aleix Vidal y Gnagnon, que no tienen ficha europea. El vasco no escatimará en recursos pese a venir de un exigente partido en Granada y tener el siguiente duelo ante el Eibar a la vuelta de la esquina. La cita requiere las mejores galas y el Sevilla se presentará con todo su arsenal. Tras vencer seis veces la Europa League, el techo del Sevilla necesita romperse. No es algo sencilla, pues necesita muchos factores para asentarse en la élite, pero existe ilusión en el sevillismo. Hay equipo, hay entrenador y hay estructura de club para lograrlo. No han sido muchas las temporadas de su historia donde se haya conseguido tener esta ilusión. Dibujar un camino dorado depende de sí mismo. Twitter: DAVID RUIZ @David_ruizm Foto: QUICO PÉREZ VENTANA @perezventana
