David Ruiz

Dortmund 2 – 2 Sevilla FC – Ejemplo de cómo caer con honor

Escrito por David Ruiz. Creado en Sevilla FC

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El Sevilla FC dice adiós a la Champions tras empatar en Dortmund. El doblete de En Nesyri no fue suficiente para que los hispalenses igualaran la eliminatoria, pese a ser mucho mejor que su rival en gran parte del encuentro. Haaland, varias decisiones dudosas del colegiado y el VAR, marcaron la diferencia.

DORTMUND: Hitz; Morey (Meunier 90′), Can, Hummels, Schulz (Zagadou 89′); Dahoud, Delaney, Bellingham; Hazard (Passlack 67′), Haaland, Reus.

SEVILLA FC: Bono; Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos, Acuña; Joan Jordán (Papu Gómez (60′), Fernando (Rakitic 86′), Óscar Rodríguez (Óliver 79′); Suso (Munir 86′), Ocampos (De Jong 60′), En-Nesyri

GOLES: 1-0 M.35 Haaland; 2-0 M.54 Haaland; 2-1 M.68 En-Nesyri (p.); 2-2 M.90+5 En-Nesyri

ÁRBITRO: Cuneyt Çakir. Mostró amarilla a Morey (20′), Haaland (55′), Can (67′) / Acuña (40′), Koundé (51′), Joan Jordán (55′), Óscar (71′), Fernando (76′), Diego Carlos (78′).

NÚMERO 1 DEL SEVILLA FC: En Nesyri

Quedar eliminado nunca puede ser una buena noticia para un equipo de fútbol, pero hacerlo como lo hizo el Sevilla sabe mejor. Y no porque se haya quedado a tan solo un tanto de igualar la eliminatoria, sino porque no dejó de intentarlo en todo momento. Murió con las botas puestas.

Al Sevilla no le está sonriendo esa pizca de suerte que sí ha tenido en eliminatorias pasadas. Le pasó ante el Barça y esta noche, tras media hora de juego sublime, le volvió a ocurrir. Mazazo moral en un momento clave. Y no sería el único. Lo alabable fue que consiguiera reponerse.

Porque solo el gol le faltó a la primera media hora sevillista. Llegó bien por todos los costados, presionaba alto, robaba, atacaba rápidamente. Tenía al Dortmund en su campo, acobardado, sin poder salir. Pero en Champions si perdonas, pagas factura. Y un crack como Haaland las cobra.

Suyo fue el primer tanto de la noche y suyo sería el primer mazazo de un Sevilla que notaría el golpe hasta el descanso. Se esfumó ese Sevilla tan efervescente. Pero iba a acabar volviendo en la segunda mitad, después de sufrir otro golpe que para muchos sería K.O.

Porque fue en la segunda mitad donde llegó el espectáculo del VAR. Haaland anotaba un gol haciendo falta sobre Fernando, todo hacía indicar que en la revisión se iba a anular. Y así sería, pero habría sorpresa. Se pitaría un penalti de Koundé producido un minuto antes de la jugada.

Pero, si fuera poco, ahí no acabaría la historia. Haaland iba a errar el penalti. La afición sevillista se agarraba a ese posible punto de inflexión cuando volvería el agua helada: Bono se había adelantado, había que repetir. Y Haaland falla una vez, no dos.

Con 2-0 en contra el Sevilla seguía necesitando lo mismo, tres tantos. Pero mientras el aficionado de a pie se lamentaba y preguntaba cómo de un partido (y quizá eliminatoria) en el que había sido tan superior en tantos tramos podía acabar así, los jugadores iban a lo suyo. Tenían fe.

Y fue ahí donde merece la pena quitarse el sombrero con esta plantilla. Otros habrían pensado en el derbi, pero Lopetegui y los suyos decidieron no arrojar la toalla. Fueron a por el Dortmund y consiguieron apretarles hasta el final con un protagonista, En Nesyri.

El marroquí anotaba a falta de 25 minutos un penalti que invitaba a la ilusión. Le dio alas a un Sevilla que necesitaba dos más, pero el reloj en Alemania corría muy deprisa. Iba a acabar muriendo en la orilla, pero aún faltaba algo más.

En el descuento, en una de tantas en las que el Sevilla centraba el balón al área, llegó el segundo de En Nesyri con un excelente cabezazo tras no peor centro de Rakitic. Solo este Sevilla era capaz de dar esperanza. Al menos, le regalaba un minuto más a los suyos. 

Y la llegó a tener. Primero Rakitic y luego Diego Carlos tuvieron una ocasión inmejorable para hacer una gesta que habría estado a la altura de grandes noches nervionenses. Pero la Champions pide algo más. Algo que sí tuvo el Dortmund y que el Sevilla, por más que lo intentó, no consiguió tener.

La batalla perdida insufla ánimos en una afición que venía desilusionada tras la última semana. Este equipo puede si quiere. Hoy estuvo a las puertas de conseguir los que pocos habrían conseguido. Merece la pena creer. No levantará plata esta temporada, pero aún queda pelear por la cuarta plaza.

Por : David Ruiz

Fotos : SEVILLA FC