El Sevilla FC volvió a caer en el Camp Nou, como es habitual, y sin competir. Pésimo planteamiento de Sampaoli y mal partido de sus jugadores, que en ningún momento inquietó en los 90 minutos al FC Barcelona. Aguantó solo 45 minutos, y porque los de Xavi no estuvieron acertados. Visitar este feudo es una visita al dentista para los de Nervión.
FC BARCELONA: Ter Stegen, Koundé, Araujo (Marcos Alonso, min. 80), Christiensen, Jordi Alba, Pedri (Balde, min. 83), Busquets (Kessie, min. 8), De Jong, Rapinha (Ferrán Torres, min. 84), Gavi (Ansu Fati, min. 80) y Lewandowski. SEVILLA FC: Bono, Montiel, Badé, Gudelj, Rekik, Acuña (Ocampos, min. 65), Óliver Torres (Bryan Gil, min. 46), Rakitic, Joan Jordán, Gueye (Fernando, min. 83) y En-Nesyri (Lamela, min. 46). GOLES: 1-0, minuto 58: Jordi Alba; 2-0, minuto 70: Gavi; 3-0, minuto 79: Rapinha. Árbitro: José María Sánchez Martínez, del colegio murciano. Amarillas para Rakitic, Joan Jordán. Incidencias: Estadio Camp Nou ante 80.000 espectadores. El Number 1 del partido: Bono El Sevilla suele contar sus partidos en el Camp Nou por derrotas y esta no iba a ser una ocasión especial. Ni el mejor Sevilla de los últimos tiempos ha sido capaz de sacar algo positivo allí, menos este Sevilla tan pobre y falto de cualquier atisbo de competitividad. Derrota clara, contundente, de las que duelen. Provocada principalmente por un ataque de entrenador que hoy no estuvo a la altura.
Como tampoco lo estuvieron varios nombres propios del Sevilla. Hombres como Rakitic, Jordán o Montiel, que apareció en la foto de los tres goles. La primera parte que perpetró el conjunto de Sampaoli fue dantesca, solo salvada porque el FC Barcelona fue incapaz de anotar. Salió el técnico argentino con mucho centrocampista, teóricamente para tener balón, pero obtuvo un 90% de posesión en contra. No amenazó en ningún instante el equipo sevillista. Ni a la contra, ni con espacios ni en ataques posicionales. Fue la nada más absoluta en ataque y eso ante un equipo como el Barcelona se paga caro. Los culés solo tuvieron que esperar el momento, el fallo, la desconcentración. Y esta llegó en la segunda mitad. Sampaoli introdujo a Lamela y Bryan Gil, pero situó a Rakitic de falso nueve. Lo dicho, ataques de entrenador. Porque lo de Bryan y Lamela era entendible, al menos sobre el papel. El Sevilla necesitaba amenazar de alguna forma al Barça y la opción de hacerlo al contragolpe era lógica. Pero nada más lejos de la realidad. El Barça pisó el acelerador y en 20 minutos sentenció el encuentro. Persiguió sombras el Sevilla. Era el de la primera mitad, pero con goles en contra. Otra imagen deplorable, otra decepción más que añadir a su historial en el Camp Nou. Parece claro que el objetivo del Sevilla esta temporada es mirar de la mitad de la tabla hacia abajo y lo cierto es que esta jornada ha sido muy dura bajo ese prisma. El descenso vuelve a estar a la vuelta de la esquina, por lo que denuevo no podrá fallar en la visita del Mallorca. Esta temporada es lo que hay. Toca asumir que no está para más y que papelones como el de esta noche evidencian que el Sevilla está lejos de ser lo que fue. Twitter: DAVID RUIZ @David_ruizm Fotos: Sevilla FC
