Luis Cuervas se marchó, como lo hacen los grandes: en silencio. Con la satisfacción de haber colaborado muchos años con el que es el Club de su vida y disfrutando de los títulos en directo.
Luis Cuervas ha dejado de ser desde esta tarde Consejero del Sevilla Fútbol Club poniendo así punto y final a una etapa dorada como consejero en la que ha disfrutado de los mayores logros de la historia del conjunto sevillista. Su salida era una decisión que tenía tomada desde hace varias semanas aunque no ha sido hasta el día de hoy hasta el que no se ha hecho oficial en la reunión del Consejo de Administración sevillista, Luis Cuervas se marcha en silencio, sin alzar la voz y con la misma humildad y sencillez con la que se incorporó en el 2004 al Consejo presidido por
José María del Nido. Una vez abandonado el cargo de consejero sevillista se incorporará a sus nuevas funciones como Delegado de la UEFA, propuesta que recibió hace un par de años y que no ha dudado en aceptar ahora que su vinculación con el Sevilla FC ha terminado. Toda la suerte del mundo para un sevillista de bandera; hijo del que fuera presidente sevillista, Luis Cuervas, y hombre fiel de un Consejo que abandona siete años después de su entrada en el mismo y con demasiados cambios de un tiempo a esta parte. Un ejemplo de sevillista.