Al presidente del Real Madrid no paran de salirle granitos en el tema del nuevo reparto del fútbol en televisión. En esta ocasión Miriam Blasco, candidata a convertirse en el máximo cargo del Gobierno tras las elecciones del próximo domingo, no tiene pelos en la lengua para hablar de un reparto televisivo más justo.
A Florentino Pérez le salen granos por todos lados, si en la última semana incluso Sandro Rosell se empezaba a desmarcar de la sinrazón y admitía que algo habría que cambiar, ahora la medallista olímpica Miriam Blasco, portavoz del PP en el Senado y candidata a ostentar el máximo cargo deportivo en el próximo Gobierno, habla muy claro del tema por el que el Sevilla FC con su presidente a la cabeza viene luchando contra los poderosos del fútbol español: Miriam Blasco se muestra clara, concisa y razonando todas sus respuestas: Hace unos días, José María Del Nido avanzó que cuando los principales equipos europeos sean consciente de lo que sucede en España, lo injusto se volverá más justo por el bien del fútbol español. Para ello Miriam Blasco aboga por conseguir un consenso en el que la mayoría salga ganando: Parece que para el fútbol español, afortunadamente y como no podía ser de otra manera, el futuro de «la Liga de Florentino» comienza a ser cada vez más incierto. Twitter: @NachoMateos
«Hay que apoyar a los pequeños equipos, porque es verdad que la Liga española no existiría si no llega a ser por todos los demás equipos».
«Es verdad también que el Real Madrid y el Barcelona venden mucho más que cualquier otro, así que estoy de acuerdo que haya una parte proporcional mayor para ellos. Pero también creo que los otros equipos tienen que llevarse lo que les corresponden porque sus ingresos son totalmente inferiores».
«El fútbol está viviendo por encima de sus posibilidades y hoy en día solo dos clubes son rentables. Cada vez hay más concursos de acreedores y si esto se rompe saldrán perdiendo el Real Madrid y el Barcelona igualmente. Lo que tenemos que hacer es buscar consensos entre todos y nosotros lo que pretendemos es poder dialogar con todos y poder ser intermediarios de esa negociación.
La LFP necesita replantearse su forma de funcionar».