El Sevilla FC comienza una nueva temporada haciendo limpieza con la anterior, ya en el olvido. Toca empezar de cero, con caras nuevas y alguna más que aún está por llegar y con la difícil tarea de ilusionar a una afición hastiada. García Pimienta es el nuevo capitán de un barco que sufrirá mucho para llegar al puerto. El objetivo es estar en Europa, pero lo prudente es ir partido a partido y dejar atrás el sufrimiento del descenso.
Arranca una nueva aventura en clave sevillista. Una vuelta a la realidad que frunce el ceño del sevillismo, quizá algo ajeno al ruido de su club tras un verano de Eurocopa y JJOO. No las tiene todas consigo una afición que lleva sufriendo dos temporadas y viendo las orejas a un lobo cada vez más feroz. Se parte de cero y, por tanto, existe un halo de esperanza en que el Sevilla FC funcione, pero la exigencia será máxima y está por ver si el club está a la altura.
Un club que se ha dejado llevar por acciones populistas, que ha dejado que desear en muchas decisiones y al que le ha costado caro escupir para arriba. No se quieren escuchar palabras ni promesas, solo trabajo y resultados y en eso anda un García Pimienta que ha llegado con ilusión a su nueva casa. Su primera prueba será su anterior equipo, la UD Las Palmas, en un feudo que no se le da mal al conjunto hispalense.
Un Sevilla renovado, con salidas y llegadas importantes y que buscará desde un estilo protagonista con balón obtener resultados. Está apuesta no funcionó en el pasado, pero el club ha decidido seguir por ese camino y no queda otra que confiar en que en esta ocasión salga bien. Jugadores como Peque, Saúl, Iheanacho, Lokonga, Agoumé o el propio Isaac serán fundamentales para complementar a los Ocampos, Navas, Acuña o Nyland en la temporada.
Los primeros tres encuentros ligueros se disputarán con el mercado abierto, por lo que el escollo será grande para encontrar la estabilidad y el compromiso necesario en la mayoría de equipos, que aún no están completos. Será clave vencer y sumar, aunque no se haga siguiendo una idea o un estilo concreto, ya habrá tiempo para ello. Se necesita ganar, sumar a la afición a la causa y mirar siempre hacia arriba en la temporada, donde nunca debió dejar de mirar.