Ya solo quedan cinco asaltos, cinco grandes premios para conocer el próximo campeón del mundo. Y parece que va a ser cosa de cuatro, Fernando, Vettel y Raikkonen y Hamilton, visto lo visto hoy.
Sin duda Vettel es el más fuerte en su conjunto, por la confianza que transmite ahora el coche, y por confianza en sí mismo. El coche ha ganado fiabilidad. Sin duda ha sido un gran premio insultante para todos, y parece que han resuelto los problemas que han tenido los últimos grandes premios. Fernando ha perdido hoy parte del margen que tenia con respecto al alemán. Se ha quedado a tan solo cuatro puntos de Vettel. Sin duda la mala suerte se ha aliado con el español desde ayer en la Q3, y no le ha abandonado hasta la primera curva del Gran Premio. Pero Fernando sigue siendo mágico con sus manos y sin tener el mejor coche de parrilla, sigue pidiendo a su equipo lo máximo en estas últimas carreras para poner su talento, y así seguir teniendo posibilidades de poder estar en lo más alto. Ahora no basta con hacer podios, sino que hay que ir al ataque y ganar carreras si se quiere tener posibilidades. Raikkonen, que sin hacer ruido y sin haber ganado ninguna carrera, también tiene posibilidades, y está a tan solo 37 puntos. Y Hamilton, capaz de lo mejor y de lo peor, es el que menos posibilidades, y con su marcha de Mclaren, no sé yo si tendrá todo el apoyo del equipo hasta el final de la temporada. La configuración de la parrilla se vio algo accidentada, en los últimos minutos debido a la salida de pista que sufrió kimi Raikkonen, que justo detrás pasaba Fernando Alonso, el cual se vio perjudicado con un una bandera amarilla, y no poder completar la buena vuelta que venía haciendo. Así pues, Fernando hizo el séptimo mejor tiempo, pero salía el sexto debió a la penalización de Button, al poner una nueva caja de cambios. Vettel y Webber, monopolizaban la primera fila de la parrilla por primera vez esta temporada, con Kobayashi tercero, Grosjean cuarto, en tercera línea se situaba Sergio Pérez junto a Fernando Alonso. Por detrás, Pedro de la Rosa, hizo su mejor clasificación posicionándose en parrilla en el puesto veinte. La lucha por no ser el último equipo de la parrilla, se la disputan entre HRT, Caterham y Marussian. Esta lucha se centra principalmente porque si te sitúas más allá de la decima posición, te quedas sin premios económicos por los ingresos de televisión, y sin duda nuestro Pedro lo va a dar todo hasta la última carrera, y esta ha sido la primera de las seis que faltan. La anécdota antes de la carrera, con la apertura del pit line, fue la perdida de una pieza en la parte trasera del coche de Webber. Rápidamente volvió al box, para intentar solventar el problema. Finalmente se situó en parrilla en su posición. A las ocho de la mañana, hora española, y con un ambiente apasionado, un circuito increíble que despide, desde sus gradas hasta el asfalto. Curvas rapidísimas y lentas, peraltadas, con rectas largas y una chicane espectacular, con todo eso y 53 vueltas por delante, se apago el semáforo en Suzuka. El circuito con mayor distancia desde la salida hasta la primera curva, todos con neumáticos blandos y una gran preocupación por la degradación de los mismos, se llaga a la primera curva. El primero en llegar a la primera curva es Vettel junto con Kobayashi y Webber. Fernando se va por fuera de la pista, y es tocado levemente con Kimi en su rueda trasera por el alerón delantero del finlandes. Esto le hace que pinche, pierda el control justo antes de tomar la curva, se sale de pista, trompea y definitivamente se queda fuera. Safety car sale por tanto a pista. Webber se ve implicado con Grosjean y entre en box a cambiar el morro. En la segunda vuelta se va el coche de seguridad y se relanza la carrera. Primero Vettel, Kobayashi, Button, Massa, Raikkonen. Sin duda un inicio de carrera que no estaba en nuestros planes. Con estas posiciones en la vuelta cinco, es un desastre para las aspiraciones de Fernando de cara al mundial. Sin duda había que confiar en la suerte para que se diera todo de cara a favor de Vettel.