El día del Number 1: Luis Arconada

Escrito por José Miguel Muñoz. Creado en Más Fútbol, Nuestros números 1, Number1 opina

Tagged: , , , , , ,

Tal día como hoy, 26 de junio del año 1954, venía al mundo Luis Miguel Arconada Echarri, el que con el paso de los años se convertiría, primero en el mejor portero de España, después en Leyenda.

Los años pasan, pero hay cosas que nos hacen eternos, como el recuerdo. Y ese recuerdo sigue vivo, intacto, tan fácil como cerrar los ojos, echar la vista atrás y ver volar de palo a palo al portero más grande que ha dado este país: Luis Arconada. Nacido en la inagotable cantera donostiarra regaló sus primeros vuelos imposibles en la Playa de la Concha, donde ya dejó muestras de ese carácter que años más tarde le convertirían en el más grande.

Un mito, una Leyenda, de esas que nada ni nadie puede destruir. Un portero formado así mismo, un referente, antes y después de su retirada en 1989, y un espejo en el que mirarse, tanto por sus condiciones como guardameta sino por el ejemplo que como persona ha sido siempre: recto, sin dobles caras, serio, profesional y entregado al máximo. Valores que se fueron perdiendo de moda en esta sociedad tan manipulada.

Ahora, permítanme que me dirija a Luis, ayer mi ídolo, hoy también amigo y persona en la que confiar al cien por cien tanto personal como profesionalmente.

Querido amigo Luis, te haces mayor jeje… 63 castañas te contemplan desde hoy, ya peinando canas, conservando el pelo (lo que yo no conseguí, hasta en ese me ganas), esposo, padre y abuelo, mejorándote en cada una de ellas y luciendo siempre ese número 1 que forma parte de ti y por el que decidí llamar así este proyecto de Number 1 Sport en el que siempre estás presente.

Los años pasan, pero el recuerdo y el cariño crecen día a día, porque hay cosas que cuando se tiene la suerte de poder vivirlas, verte jugar una de ellas, da igual lo que pase u ocurra luego, porque ni otros grandes como Iker Casillas lo pueden mejorar. Te lo dije el día que me anunciabas que el camino tocaba a su fin, que llegaba el momento del adiós, de colgar esos guantes y ese dorsal número 1 que la Real Sociedad debería haber retirado en tu honor.

En aquel momento no entendí esa despedida en tu mejor momento, pero con el paso de los años entendí tus motivos. Recuerdo que me dijiste que «prefiero que me recuerden en mi mejor momento, porque esa será la imagen que siempre guardarán de mí». Y así fue, tu recuerdo no sólo quedó vivo sino que siguió creciendo, por mi parte y por parte de cada uno de los ‘Arconadistas’ que seguimos manteniendo de una u otra forma viva esa imagen intachable tuya.

La misma que otros intentaron derribar, de forma cobarde, en ese deporte que tanto gusta en este bendito país de acabar con nuestras Leyendas. Que le pregunten ahora al gran Iker Casillas… Pero hoy quiero quedarme con tu cumpleaños, con este particular homenaje que firmo yo pero que estoy seguro que suscribe cada uno de los que soñamos ser como tú, emular tus grandes vuelos, con ese uno grabado en la espalda como si fuera una segunda piel.

Hoy, el día de tu cumpleaños, quiero darte una vez más las gracias. Gracias por tus vuelos imposibles, gracias por mostrarnos ese carácter tan importante en todo lo que hagamos en la vida. Gracias por tu rectitud, por tu seriedad, tu profesionalidad, ejemplo para cada uno de los que te hemos seguido, y que tanto bien nos ha hecho en nuestro día a día. Gracias por enseñarme que los pequeños también ganan. Cómo recuerdo aquella Liga de Gijón y aquel partido en Sevilla donde la Real Sociedad perdía tras 32 partidos invictos, con maletín incluido como reconocía en Marca el sevillista Bertoni, uno de los protagonistas de aquella historia…

Gracias por tanto… y por nada, porque siempre has restado la importancia que tiene a todo lo que has hecho. Bien por humildad, o porque no eres consciente de todo lo que significas en cada uno de nosotros. Gracias por habernos permitido crecer mirándonos en tu espejo. Gracias por convertirte en el primer ídolo del fútbol español, con lo que ello significaba en aquella época.

Gracias por cada uno de esos 63 años, o lo que es lo mismo, por estos 22.995 días que nos has regalado. Gracias por estar siempre ahí y especialmente por a diferencia de otros, no desaparecer en los malos momentos, Gracias por ser mi amigo, mi segundo padre, mi asesor, hombre de confianza… y así podría seguir.

Gracias por hacerme parte de tu familia, gracias también a Carmen, Luis Jr., Nerea, Ana y Mikel por su cariño y confianza. Quién se lo iba a decir a ese niño jerezano que con apenas 8 años, la edad de mi hijo Iker, se escapaba de casa para ir a verte a cada hotel ya fuera en Sevilla, Cádiz, Málaga… el destino daba igual siempre y cuando tú estuvieras allí para enseñarte aquellos libros que hacía con los recortes de prensa escribiendo mis primeras crónicas (que aún conservo) y sin saber que un día volvería a hacerlo en la prensa nacional e internacional. Está claro que yo también me fui haciendo mayor.

El hecho de que mi hijo tenga nombre vasco Iker, también está relacionado contigo. Por ser vasco y por lo que significa Iker: el que trae buenas noticias. Como siempre las has traído tú querido amigo Luis.

¡Feliz día de tu cumpleaños! Ya son 63…

Tu amigo

José Miguel Muñoz

Texto: JOSÉ MIGUEL MUÑOZ @tara11iker

Foto: Archivo José Miguel Muñoz y Real Sociedad