Mucho se habló de Luis Enrique tras confirmar Luis Miguel Rubiales que era el nuevo seleccionador español; tanto que le colocaron en el punto de mira incluso antes de debutar.
Luis Enrique tapa bocas y cierra el debate sobre si sería del agrado de los aficionados tras convertirse en nuevo seleccionador español. Hay que vender y a veces, el periodismo, se olvida de sus raíces, de ese periodismo de antes y no este circo que han montado unos cuantos y que ha perdido esa fuerza y credibilidad que hacían magia en esta bendita profesión.
Por eso, uno se alegra cuando alguien sin alzar la voz tapa bocas, cuando demuestras que a veces es mejor estar callado si no eres capaz de decir nada más bello que el silencio. Y eso es lo que ha hecho el seleccionador español, Luis Enrique, tras llegar al cargo en tiempos movidos en la Real Federación Española de Fútbol tras la fea jugada de Lopetegui y el Real Madrid, a puertas del debut de España en el pasado Mundial de Rusia 2018.
Hubo quien se llevó las manos a la cabeza, quien clamó al cielo al ver que el ex técnico azulgrana llegaba a la RFEF para dirigir a la selección, quien dijo que cómo podía hacer eso Luis Miguel Rubiales… vamos como si Luis Enrique tuviera menos derechos para trabajar en su país que otros a los que le dan todos y se sigue pidiendo más. Como si Lucho debiera dinero o tuviera alguna cuenta pendiente.
Pero ya saben aquello que decía mi madre: “Tranquilo que el tiempo pone a todo el mundo en su sitio”. Y eso es lo que ha hecho el tiempo… ¡Y el fútbol! El fútbol de España, el fútbol de la selección, el fútbol de la España de Luis Enrique, porque pese a quien pese, esta selección respira bien, ha salido del estado grave en el que algunos caprichosos le dejaron tras el Mundial de Rusia 2018, y vuelve a ilusionar.
Porque a Luis Enrique le han bastado un par de partidos oficiales, el de su debut ante Inglaterra en el mítico Wembley, y el de Elche frente a Croacia, con goleada incluida, para demostrar que su filosofía de fútbol, esa con la que conquistó primero Vigo y posteriormente enamoró en Barcelona sigue intacta muy a pesar de sus numerosos detractores. Y no se ha conformado con eso sino que ha ido sumando triunfos y goleadas, como la de hace unos días ante País de Gales y a puertas del partido ante Inglaterra en el Benito Villamarín.
Luis Enrique, como todos los genios, no tiene punto intermedio: o cae bien o cae mal, o gusta o no gusta, esa es su idiosincracia. Su llegada a la selección para suplir al ‘fugado’ Julen Lopetegui fue un golpe de efecto con el que el presidente de la RFEF lograba su objetivo: crear opinión y que se hablara de la selección, algo que ha conseguido por dos lados.
De uno, por el fichaje de Luis Enrique, que siempre genera opinión; y de otro, por el buen arranque del combinado nacional de su mano, sumando dos victorias en los dos partidos disputados, oficiales ambos, lo que sin duda da más valor si cabe a las pruebas, con una regeneración necesaria en la selección española y lo más importante, ante dos selecciones de máximo nivel como la siempre pionera Inglaterra, y Croacia, subcampeona del mundo tras su brillante papel en el pasado Mundial de Rusia 2018.
¿Ladran? luego cabalgamos, querido Sancho, decía don Quijote de la Mancha el Hidalgo Caballero, frase que desde ya puede hacer suya Luis Enrique. Que sigan ladrando Míster…
Por: JOSÉ MIGUEL MUÑOZ @tara11iker
Foto: Ok diario