Mismos errores cometidos que en la temporada pasada, parece que el club no ha querido corregirlos de cara a su crecimiento deportivo. Y cada vez queda menos tiempo…
Lees en las redes sociales ciertas frases que te recuerdan a la temporada anterior que terminó hace pero que muy poco: “fichajes inflados, defensa blanda, portería insegura, entrenador terco…”, nada nuevo bajo el sol. Incluso la victoria ante el Athletic de Bielsa llenó de prudencia a una afición que vio la jornada de ayer más como una prolongación del curso anterior que del comienzo de uno nuevo. Del partido contra el Rayo, a saber:
Portería: Con casi toda probabilidad lo más preocupante de la plantilla; la inseguridad de Fabricio, impropia de un portero que quiere ganarse el puesto, ha propiciado que se piense en Casto…como si Casto fuera la solución a los problemas debajo de los palos. De aquí al final del periodo de fichajes no se fichará un portero. ¿Adrián?. Pensemos en esa opción.
Defensa: Repleta de efectivos de corte medio/bajo, sólo Paulao es garantía de seguridad. Nelson debería estar reflexionar sobre su estado físico, mental o el que mejor le apetezca cuando Chica es titular, un completo coladero por su banda. ¿De verdad que en la cantera no hay zagueros mejores que los que jugaron ayer?; poque si bien Perquis aportará calidad, ya ha advertido Hadzibejic, uno de sus valedores en tiempos de joven, que necesitará tiempo para adaptarse a la liga española, así como las referencias de una excesiva agresividad que puede traer problemas. Con todo ello, quizá no sea del todo grave la carencia atrás si este equipo no jugase tan por encima de sus posibilidades atacando.
Medio campo: Hasta que Nosa Igiebor demuestre otra cosa, hoy esta plantilla echa de menos a Iriney, más por su garra e implicación que por calidad. Cañas, cuya temporada anterior dio muchas esperanzas, tendrá que imponer más carácter si quiere llevar las riendas del juego de este equipo; no es lo mismo dirigir que acompañar, que fue lo que hizo el canterano en el anterior ejercicio. Pocos pases y desasistiendo a los defensas, muy solos en determinadas contras del Rayo. Beñat, con un buen tiro al larguero en la primera parte, fue de más a menos durante el transcurso del partido; Juan Carlos no resulta jugador para noventa minutos.
Delantera: La titularidad de Pereira desde un principio hubo quien la entendió más como un mensaje de Pepe Mel a Stosic que como una decisión técnica; el que este futbolista disfrute de más minutos que Campbell al día de hoy cuando la resistencia no es lo suyo ya es para reflexionar. Agra, gris, parece que no es lo que vendieron la temporada pasada desde Portugal y la secretaría técnica, lo que resulta a destacar puesto que sí es titular desde el principio, señal de que el entrenador en ese puesto no las tiene todas consigo. Jorge Molina, el mejor en estas dos jornadas, impecable con tres goles en dos partidos, más no se le puede pedir. Genial por él.
Mel: No tener más mimbres que los hay tampoco da derecho a encogerse de hombros repitiendo errores de la anterior campaña. Esta plantilla no está capacitada para jugar atacando como si las aspiraciones fueran distintas a la permanencia. Curioso además, que habiendo fichado extremos no haya abierto el partido a las bandas para jugar contra un sistema de tres defensas. Acepte el reto con lo que tiene o asuma lo que hay, pero la autocomplacencia no vale.
Perder en la segunda jornada dará opciones para corregir errores heredados; sin embargo, cabe la preocupación de que otros puedan seguir repitiéndose en el tiempo. Mel es quien tiene la llave.
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