El Real Madrid piensa ya de lleno en el Borussia y en la preciada Champions League tras deshacerse del Real Betis a pesar de jugar con un once inédito y tener la mente puesta en la Liga de Campeones.
REAL MADRID: Diego López; Carvalho, Marcelo (Varane, min. 15), Albiol, Nacho; Casemiro, Özil, Modric (Pepe, min. 63), Callejón, Ronaldo y Benzema (Higuaín, min. 72). REAL BETIS: Adrián; Chica, Paulao, Amaya, Álex Martínez: Cañas (Rubén Pérez, min. 67), Beñat, Nosa (Molina, min. 46), Campbell (Vadillo, min. 59), Pabón y Rubén Castro. GOLES: 1 – 0, min. 45, Ozil. 2 – 0, min. 57, Benzema. 2 – 1, min. 73, Jorge Molina (p). 3 – 1, min. 90, Ozil. ÁRBITRO: Álvarez Izquierdo (C. Catalán). Amonestó a Nacho (min. 71), Higuaín (min. 78) y Ronaldo (min. 82) por parte del Real Madrid. Amonestó a Cañas (min. 55) por parte del Betis. NUMBER 1 DEL REAL BETIS: Pabón. Lo tuvo en su mano el Betis pero no lo aprovechó y ya se sabe lo que ocurre cuando esto lo haces ante un equipo del potencial del Real Madrid, ya sea con su equipo A como el caso de hoy con el B, por aquello de estar pensando de lleno en su compromiso de la Champions League donde se juega el ser o no ser en tan preciada competición. La apuesta de Pepe Mel no dio los resultados apetecidos y eso que ocasiones para ello hubo, pero el Madrid es mucho Madrid y cuando vio peligrar el marcador, apretó lo suficiente para sacar el partido adelante ante un Betis que dispuso de sus ocasiones para cuanto menos salir mucho mejor parado de lo que lo hizo en el Santiago Bernabéu. Mourinho dejó claro en la previa que era más importante ganar en la Liga de Campeones que hacerlo ante el Betis. En lo que a lo primero se refiere no sabemos, pero en lo del Betis sí, el Madrid demostró porque es segundo y porqué nadie ha ganado en su feudo. Simplemente porque es mucho mejor que el resto, incluso cuando el resto tiene opciones de sobra para ganar en tan complicado terreno. A ello hay que unir que los blancos marcaron cuando más lo necesitaban y cuando más duele. Si ante el derbi fueron ellos los que disfrutaron de marcar en el 45, esta vez el honor fue para su rival. Özil marcaba en el último minuto de la primera mitad y tranquilizaba a los suyos encarrilando el partido.
A poco de iniciarse la segunda mitad, Benzema hacía el segundo dejando el choque sentenciado. O al menos así lo auguraba la parroquia madridista, que vio como el miedo entraba por momentos en el cuerpo después de que Jorge Molina hiciera el 2-1 al transformar un penalti a los 73 minutos de partido, metiendo de nuevo al Betis en el partido. Había encuentro y por sí había dudas, el equipo de Mel dispuso de ocasiones incluso para empatar, especialmente en una rocambolesca ocasión que no llegó a concretar, algo que sin duda llamaba la atención después de que Pabón estrellara el balón en el larguero, y los posteriores remates de Rubén Castro los salvara in extremis en la línea de gol un defensor blanco. Y ya se sabe la ley del fútbol, si perdonas lo pagas. Y eso es lo que le ocurrió al Betis que perdonó en lo que podría haber sido el empate a dos, y de disfrutar de una ocasión clara para poner las tablas en el marcador, pasó a ver como el Real Madrid sentenciaba y dejaba el partido finiquitado. Una nueva contra, con centro de Cristiano Ronaldo servía para que Özil volviera a marcar haciendo el definitivo 3-1. Al final, victoria clara y justa de un Real Madrid que fue mejor, ante un Betis que dispuso de sus ocasiones, para cuanto menos meter el miedo en el cuerpo a un semifinalista de la Liga de Campeones que llegará al partido ante el Borussia con los deberes hechos y con la plantilla descansada, ya que ante el equipo verdiblanco Mourinho alineó un once totalmente inédito. El Betis se va de vacío de un estadio donde nadie fue capaz de ganar, y los de Mel no fueron una excepción, se fueron de vacío, y eso supone frenar, al menos de momento sus aspiraciones europeas que pese a la derrota, sigue manteniendo intactas en esta recta final de Liga. En definitiva, el plan ‘B’ de Mourinho fue suficiente para derrotar al Real Betis. Twitter: @tara11ara