Las muestras de Carles Puyol con Miki Roque fueron siempre destacadas por el jugador del Betis; una grandeza la del capitán azulgrana que ha estado por encima incluso de su valía futbolística.
Hablar de Carles Puyol es hacerlo de un central de fuerza, de raza, uno de los mejores defensas del mundo que en la enfermedad del bético Miki Roque ha mostrado su valía y su gran humanidad. Nada más conocer la grave enfermedad de Miki, el capitán del Barça estuvo siempre a su disposición: llamando a Miki, apoyándole, pública y privadamente. Demostrando ser ante todo persona, un tipo grande, muy grande. Miki era natural de Tremp mientras que Puyol lo es de La Pobla de Segur, dos localidades muy cercanas y separadas por escasos trece kilómetros, además de ser amigos de la madre de Miki, amiga de la madre de Puyol y en su infancia vecina también del pueblo del jugador del Barça.
Cuentan incluso que Puyol ha corrido con los gasto clínicos de Miki durante su ingreso en la Clínica Dexeus y su operación, además de ser clave para las facilidades dadas por el Fútbol Club Barcelona, que también ha tenido un trato espectacular, para que Miki utilizara sus instalaciones y así poder hacer más llevadero su calvario. Puyol es un gran defensa, lo ha ganando todo, pero por encima de todo, es humano y lo ha demostrado. Un ejemplo a seguir y un apoyo constante para Miki Roque en los momentos más duros de éste. Debería os de tomar buena nota de gestos como el de Carles Puyol. Twitter: @tara11ara