El Real Betis Balompié cosechó la segunda derrota consecutiva en LaLiga dentro del Benito Villamarín, en lo que fue un partido loco y una segunda parte paupérrima que terminó con el enésimo error arbitral en contra de los verdiblancos
REAL BETIS: Rui Silva, Sabaly, Pezzella, Luiz Felipe, Miranda (Abner 78′), Guido Rodríguez (Edgar 62′), Guardado (Joaquín 62′), Canales, Juanmi (Luiz Henrique 78′), Fekir y Borja Iglesias (Ayoze 73′).
RC CELTA: Iván Villar, Mingueza (Solari (85′), Unai Núñez, Aidoo, Galán, Fran Beltrán, Veiga (Óscar Rodríguez 64′), De la Torre (Cervi 64′), Carles Pérez (Vázquez 85′), Aspas y Strand Larsen (Seferovic 64′).
ARBITRAJE: Carlos del Cerro Grande, comité madrileño. Amonestó a De la Torre, Luiz Henrique y Aspas. Expulsó por roja directa a Luiz Felipe.
GOLES: 0-1. Strand Larsen, minuto 6; 1-1. Juanmi, minuto 9; 2-1. Canales, minuto 23; 2-2. Veiga minuto 42; 2-3. Veiga, minuto 55; 2-4. Aidoo, minuto 69; 3-4. Fekir, (p.) minuto 84.
NUMBER1 REAL BETIS: Canales.
El equipo de Manuel Pellegrini desaprovechó la derrota del Villarreal en el campo del colista y el empate del Atleti en casa ante el penúltimo clasificado. Resultados que con una victoria colocaban a los verdiblancos a un punto de los puestos que dan acceso a la UEFA Champions League. Y lo desaprovechó de la peor manera posible, con una derrota en casa, ante un equipo de la zona baja de la tabla, y con una segunda parte muy pobre en defensa que dio lugar a un Betis desquiciado.
Además, los de Pellegrini terminaron (justa, o injustamente) de nuevo con un jugador expulsado. Y es que ya son 10 expulsiones en 20 partidos las que ha recibido un equipo muy golpeado por este tipo de acciones y que tiene como tarea principal mirarse al ombligo para que no vuelva a suceder.
El partido fue muy igualado en los primeros 45 minutos, pero es cierto que el conjunto local dominó tanto en el control del juego como en las ocasiones. No así en las áreas. Volvió el mejor Betis a nivel ofensivo, ese que si apretaba un poco el acelerador derrumbaba cualquier sistema defensivo. Pero eso provocó, parece que por arte de magia, que desapareciese la fiabilidad defensiva de un equipo que encajó cuatro goles en el cómputo general del encuentro, y se podría llegar a decir que todos fueron errores propios.
Además, se vio a un Betis inoperante al recibir los goles. Desquiciado. Con pérdidas de balón totalmente absurdas y con situaciones del juego propias de un equipo en plena crisis. Desaprovechó 8 minutos de descuento. No orquestó ninguna jugada de características reconocibles en todo el tiempo que estuvo por debajo en el marcador y además, la expulsión de Luiz Felipe puso la guinda del pastel.
Pero no queda otra que levantar la cabeza, corregir los errores y seguir adelante. Y si se mira adelante, el próximo partido es la visita a la UD Almería, donde el equipo viajará sin Fekir (cumple ciclo), Carvalho y Luiz Felipe, todos sancionados.
