Tuvo el Betis en sus manos sacar renta de su visita a La Rosaleda, pero en el último suspiro perdía y firmaba un bagaje escaso para un equipo europeo.
Un punto de los últimos quince disputados. Quien firma ese bagaje no es otro que el Real Betis europeo, que pese a que las jornadas van pasando sigue sin arrancar y metiéndose en una vorágine de la que cada vez cuesta más trabajo salir. En Málaga mejoró mucho su imagen, especialmente en la segunda mitad pero esta franca mejoría no le sirvió para sumar y respirar mejor. Llama poderosamente la atención que sea el Betis europeo el que viva esta situación, inexistente en el Betis de las dos anteriores temporadas también con Pepe Mel en el banquillo verdiblanco. El Betis es el equipo que cierra los puestos de descenso, antepenúltimo con nueve puntos, los mimos que el Almería que es penúltimo, y con uno más que el Rayo Vallecano que cierra la clasificación.
El peor visitante de esta temporada, un sólo punto de todas sus salidas, el logrado inmerecidamente en Cornellá, y con un bagaje total de dos partidos ganados, tres empatados y siete perdidos. Pero esto no es todo ya que sólo ha marcado once goles, mientras que ha encajado veinte tantos, el cuarto equipo que más goles recibe. En el lado positivo, por citar alguno en estos tiempos de crisis, destacar que los equipos que le preceden, Osasuna y Valladolid, sólo tienen uno y dos más respectivamente que los verdiblancos, pero eso sí, también hay un lado negativo y ese es que el próximo rival de los béticos es el FC Barcelona. Mal visitante para intentar buscar oxígeno aunque eso sí, el mejor para levantar la moral si suena la flauta y se gana. Twitter: @tara11ara
