El Sevilla FC sacó de forma milagrosa una victoria de San Mamés. Los de Lopetegui se sobrepusieron a una primera mitad en la que el Athletic desaprovechó demasiadas ocasiones claras. Un gol de Delaney en el único disparo a puerta hispalense adelantó a los visitantes, que consiguieron resistir en la segunda mitad con entereza y oficio. Fernando no estará ante el Atlético de Madrid al ver la quinta amarilla.
ATHLETIC: Unai Simón; Lekue (Petxarromán 66′), Yeray, Iñigo Martínez, Balenziaga; Nico Williams (Álex Berenguer 75′), Dani García (Zárraga 66′), Unai Vencedor, Munain; Raúl García (Sancet 57′) e Iñaki Williams. SEVILLA FC: Bono; Montiel, Koundé, Diego Carlos, Augustinsson (Rekik 66′); Fernando, Delaney, Óliver Torres (Joan Jordán 66′); Papu Gómez, Óscar Rodríguez (Gudelj 85′) y Rafa Mir (Munir 78′). GOLES: 0-1 min 38 Delaney ÁRBITRO: Hernández Hernández (grancanario). Amarillas a Lekue, Dani García, Unai Vencedor, Iñigo Martínez, Fernando, Rekik y Koundé. INCIDENCIAS: Estadio San Mamés ante 36.000 espectadores NÚMERO 1 DEL SEVILLA FC: Delaney Que el Sevilla haya salido con los tres puntos de San Mamés es una de esas cosas que se recordará si el equipo de Lopetegui acaba cumpliendo objetivos en Liga. Victoria milagrosa. El Athletic lo superó claramente en la mitad pero lo que conseguiría es un marcador adverso al descanso. Bono en varias intervenciones, los palos en otra y la mala puntería vasca en genera, evitaron que los locales se fueran a la ducha con el partido resuelto. Porque Lopetegui tuvo que poner a varios jugadores que o bien no dan el nivel o bien piden a gritos un descanso. Y se notó. En el primer grupo se podría incluir a Óscar e incluso a Rafa Mir, mientras que en el segundo claramente a Koundé y Diego Carlos. Los centrales sevillistas cometieron errores groseros que el Athletic no aprovechó por su alarmante falta de gol.
El Sevilla sobrevivía como podía y cuando más claro parecía el gol local, iba a llegar el visitante. Delaney se sacaba un excelente golpeo desde la frontal para dejar helado San Mamés y, por qué no decirlo, a gran parte del sevillismo. Primer acercamiento entre los tres palos, primer gol. El fútbol a veces es inexplicable y este encuentro dio ejemplo de ello. Los de Marcelino siguieron insistiendo, pero no tenían el día. Lo cierto es que en la segunda mitad ese dominio vasco iba a ir disminuyendo. El Sevilla defendió mejor que en la primera mitad y poco a poco iba a tapar los huecos por donde el Athletic hacía daño. Lopetegui introdujo cambios que funcionaron, como Rekik o Gudelj, además de dar entrada a Munir en los minutos finales para aliviar cada posesión sevillista. Resistió muy bien y acabó completando un gran partido defensivo, aunque sin acercamientos. La victoria llega en gran momento, sobre todo después de caer en Champions, pero el Sevilla empieza a pedir descanso. Necesita recuperar lesionados y poder dar relevo a jugadores que no pueden jugarlo todo. La gestión de Lopetegui será fundamental, puesto que ahora tiene que jugar Copa y después le llegan Atlético de Madrid y Barcelona antes de acabar el año. La resistencia parece que será su seña de identidad. Por : David Ruiz Fotos : Sevilla FC
