Fue la nota exótica con su fichaje por el Sevilla Atlético. Un espigado japonés que quiere demostrar que es mucho más. De momento hace goles, cinco en ocho partido, un ejemplo de ello.
Cuando fichó por el Sevilla FC para jugar en su primer equipo filial muchos pensaron que podía ser más una campaña de marketing, por aquello de su nacionalidad, más que un futbolista que pudiera hacerse con un sitio. Además, su espigada figura invitaba más a la práctica del baloncesto que a la del fútbol; pero las jornadas han ido pasando y Hiroshi tapando bocas con sus goles que no es poco. Cinco tantos en ocho partidos, una cifra que ya firmaría cualquier delantero, y que tiene más valor si cabe si tenemos en cuenta que no ha disputado todos los minutos de juego. El japonés se mostraba feliz por el ‘hat-trick’ logrado esta jornada en la goleada ante el Roquetas (7-2) como reconocía en los medios oficiales del Sevilla FC. «Estoy muy contento por los tres goles pero sobre todo por la victoria».
En estos momentos de felicidad por su acierto realizador no olvida a sus compañeros, gesto de gratitud que le honra. «Quiero dar las gracias a los compañeros porque mis goles son gracias al trabajo del equipo y sin ellos no podría rendir como lo he hecho hasta ahora». Y pese al éxito que vive no olvida la base del éxito, el trabajo. «Hay que seguir trabajando que es la clave y por supuesto disfrutar de la mejoría que está experimentando el equipo». Cinco tantos en ocho jornadas que no han saciado ni un ápice su sed realizadora. El delantero del Sevilla Atlético quiere más y más. «Cinco goles en ocho jornadas están muy bien pero siempre quiero más. Hoy estoy muy contento por estos tres goles pero pienso en los próximos que tienen que venir para darle al equipo todo lo que me está dando a mí». Pero no es más que un nombre ya que ahí están los Luis Alberto, Deivid, Cotán, Dani Jiménez… una cantera de garantías.