La trascendencia de los bolos veraniegos

Escrito por Rafael Sarmiento. Creado en Number1 opina, Sevilla FC

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Después de lo ocurrido en la noche de ayer en el encuentro entre el Sevilla y el San Fernando, voy a empezar haciéndome la siguiente pregunta: ¿es compatible estar cabreado como una mona por culpa de la imagen dada por el equipo con ser consciente de que lo de ayer fue un partido de pretemporada que no tiene ni la más mínima trascendencia?


Es curioso que todos los años pasa lo mismo. Y, como aficionado, lo entiendo perfectamente, pero no por eso voy a dejar de pedir que pongamos un poco los pies en el suelo. Me refiero al hecho de que elevemos nuestra moral o nos cebemos con nuestras críticas en función de si el equipo gana o pierde alguno de estos bolos veraniegos. Supongo que estamos tan deseosos de fútbol que a veces nos olvidamos de que estos pseudo-partidos no son más que entrenamientos con entrada y público. Y que sirven para hacer probaturas, experimentar con cosas raras, hacer muchos cambios, poner a jugadores que luego no van a rascar bola y toda esa suerte de cosas que hacen los entrenadores en estas épocas del año, más que nada porque están justo para eso. Por tanto, pocas conclusiones vamos a sacar.

Por otro lado, es evidente que perder contra el San Fernando es bochornoso para un equipo como el Sevilla. Y da igual que falten dos fichajes que se supone que serán titulares, que aún no estén Navas y Negredo, que hayan jugado Acosta, Romaric y compañía, cuando seguramente no estén a lo largo de la temporada y muchos etcéteras que se me ocurren y que no voy a poner porque los conocemos todos. Da igual de todo eso. Perder en San Fernando es un bochorno, sea como sea. Suceda como suceda.

Pero no creo que sea motivo para hundirse en la podredumbre. Este resultado vale lo mismo que los dos 0-6 anteriores. No se pueden sacar conclusiones. Sí se debe incidir en solucionar los problemas que haya porque para eso están las pretemporadas.


Pero no pasa nada, señores. No pasa absolutamente nada. Todos recordamos pretemporadas con resultados sensacionales que acabaron en desastre al final. Y casos justamente contrarios, y también mezclas de ambos.

Distinto será si la cosa no cambia cuando vaya acercándose el momento de la verdad, pero hay que recordar que, este año, ese momento llega con el inicio de la liga. Por desgracia, no tenemos que disputar ninguna Supercopa ni clasificaciones para competiciones europeas. No tenemos tanta prisa como otros años. Habrá que mejorar cosas, pero falta un mundo para hacerlo.

Lo que quiero decir con todo esto es que deberíamos darle a cada cosa la importancia que tiene, pero en su justa medida. Perder contra en Segunda B es lamentable. Hacerlo ofreciendo tan malas sensaciones, pues mucho peor. Pero sacar conclusiones sobre la calidad de ciertos jugadores, la implicación de otros, la valía del técnico o la labor de la dirección deportiva cuando esta aún no ha terminado, pues no creo que sea de recibo. A mí, a estas alturas, la verdad es que me importa bastante poco lo que haga o deje de hacer el equipo en estos bolos. Otra cosa, ya digo, es lo que vaya sucediendo a medida que se acerque la hora de la verdad.

Twitter: @Ravesen_