El Sevilla FC venció al Huesca en un espeso partido de los de Lopetegui. Munir anotó el tanto de la victoria, pero fue Bono quien sostuvo los tres puntos en los minutos finales. Era un partido trampa por encontrarse entre dos eliminatorias, pero lo volvió a sacar adelante con oficio y con esa inercia positiva que acumula en este 2021.
SEVILLA FC: Bono; Vidal (Koundé, 81′), Sergi Gómez, Diego Carlos, Rekik; Rakitic (Jordán, 64′), Gudelj, Óliver (Fernando, 81′); Munir, De Jong (En-Nesyri, 64′), Papu Gómez (Suso, 75′). HUESCA: Álvaro; Siovas, Pulido (Sergio Gómez, 81′), Silva (Insua, 16′); Maffeo, Mikel Rico (Real, 81′), Doumbia (Ferreiro, 60′), Seoane, Galán; Okazaki (Escriche, 60′), Rafa Mir GOLES: 1-0 Munir min. 57 ÁRBITRO: Medié Jimenez (catalán. Mostró amarilla a Doumbiá, Pulido, Bono, Galán, Insua, De Jong, Rafa Mir, En Nesyri NÚMERO 1 DEL SEVILLA FC: Bono No hay partido gris del Sevilla al que no le añada color Yassine Bounou. Hoy de nuevo el marroquí fue clave para mantener una victoria que parecía escaparse en los minutos finales y lo habría hecho de no ser por el meta hispalense. El Huesca mereció más, pero es difícil superar a este Sevilla. Y eso que Lopetegui priorizó el partido de Champions y dio descanso a varios pesos pesados. Se notó en la primera parte, donde se vio un Sevilla muy plano con mucho juego interior pero poca profundidad. Apenas inquietó el Huesca atrás, pero produjo muy poco arriba.
En la segunda mitad Lopetegui pasó a un 3-5-2 con Papu entre Munir y De Jong pero lo cierto es que no se notó mejoría. El equipo alto-aragonés, de hecho, mejoró. Lopetegui lo vio y decidió meter a su artillería pesada. Aunque antes de que esto ocurriera, llegaría el tanto. Jugada por banda que centra Óliver Torres tras una buena incursión en profundidad. Era lo que necesitaba el equipo blanquirrojo ante un Huesca tan cerrado y de ahí sacaría oro, pues su centro lo remataría a gol Munir, que completó un excelente encuentro. Fue entonces cuando entraron al campo Jordán y En Nesyri, con el objetivo de aguantar el marcador y sentenciar, y pudo hacerlo, pero el gol no llegaría por poco, lo que dio alas al Huesca para irse arriba y creer. La inquietud se apoderaba de un Sevilla cada vez más retrasado. El técnico sevillista introdujo a Fernando para defender los minutos finales y también a Koundé, aunque de lateral derecho por un Aleix Vidal exhausto. El francés entró frío y concedió un par de ocasiones en las que el meta sevillista tuvo que erigirse como héroe. Los tres puntos sitúan al Sevilla con 45 y una proyección de 80 puntos más que interesante. El objetivo del equipo blanquirrojo es claro, la cuarta plaza, y va por el camino correcto. Era un partido trampa que se ha evitado, ahora toca el glamour. Y el plato gordo. Ahora toca la Champions. Por : David Ruiz Fotos : Sevilla FC
