El Sevilla FC volvió a ganar, no sin sufrir, en el Ramón Sánchez Pizjuán. El Granada se adelantó, pero Diego Carlos empató antes del descanso. Se vio un Sevilla más ofensivo, especialmente en la segunda mitad, donde tuvo más oportunidades pero también las concedió. Ocampos hizo el segundo, pero en el 89 empataría Víctor Díaz en un córner. Fue entonces cuando Papu Gómez tomó las riendas para producir el tercer y cuarto tanto hispalense.
SEVILLA FC: Bono, Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos (Gudelj 79′), Augustinsson, Tecatito (Oliver Torres 84′), Jordán, Rakitic, Ocampos (Papu Gómez 67′), Martial (Rafa mir 67′) y En-Nesyri (Lamela 46′). GRANADA CF: Maximiliano, Víctor Díaz Domingos Duarte (Quini 72′), Torrente (Germán 16′), Escudero (Jorge Molina 83′), Petrovic, Luis Milla, Yan Eteki (Soro 83′), Uzuni, Machis (Arezo 72′) y Luis Suárez. GOLES: 0-1 (23′) Machis; 1-1 (32′) Diego Carlos; 2-1 (66′) Ocampos; 2-2 (88′) Víctor Díaz; 3-2 (93′) Rafa Mir y Papu; 4-2 (98´) Árbitro: Ortiz Arias (madrileño). Amonestó a Yan Eteki, Joan Jordán, Munir, Luis Suárez, Rafa Mir. Incidencias: Estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante 33.000 espectadores El Number 1 del partido: Papu El Sevilla FC se ha reencontrado con la victoria y el alarde ofensivo justo el día que el Papu Gómez vuelve a vestirse de blanco. No debe ser casualidad. Y es que el equipo que dirige Lopetegui llevaba varias semanas sin dar con la tecla en ataque. Los goles llegaban por empuje o acciones aisladas, por eso la presencia del argentino era tan fundamental para el devenir del equipo hasta final de temporada. La primera media hora del Sevilla fue horrible. Sin generar peligro al Granada y con un cambio de sistema al 4-2-3-1 que ni era determinante en campo rival ni sólido tras pérdida. Fueron los de Torrecilla los que, de hecho, se adelantaron. En la única llegada nazarí, Machís iba a encontrar un pasillo en el centro del campo para conducir y golpear a la perfección desde la frontal. Nervión empezaba a silbar. Tocaba reaccionar pero no parecía tener argumentos trabajados para lograr el empate. Faltaban automatismos, magia, y determinación en tres cuartos de campo rival. Ante la falta de ideas, tuvo que aparecer la garra de Jesús Navas, que se echó al equipo a la espalda para generar centros y centros. En uno de ellos llegaría el empate de Diego Carlos, con un buen golpeo de cabeza. Se llegaría al descanso con el Sevilla volcado y mucho más reconocible.
En la segunda mitad Lamela dio entrada a un En Nesyri que está muy lejos de parecerse a sí mismo. El Sevilla siguió insistiendo y generando. Centros desde la banda de Navas, conducciones y mucho acercamiento en forma de córners que se quedaban en saco roto. El tiempo corría y el gol era más que necesario. El Granada se estaba dedicando a defender con mucha gente en el área y cada vez urgía meter más calidad en el césped, la del Papu. Pero justo cuando su cambio se iba a producir, llegaría el tanto de Ocampos, que definiría bien ante Maximiano y, tras revisión del VAR, acabaría consumando la remontada sevillista. Con marcador a favor Lopetegui decidió seguir el plan previsto y dio entrada al Papu, aunque con un rol más conservador para defender con balón. Ese plan no salió bien. El Granada se soltó, hizo cambios ofensivos y generaría excesivo peligro hasta conseguir el empate. Un empate que llegaba en el 89, casi sin tiempo para la remontada, pero el colegiado dio 9 minutos de descuento por las interrupciones por VAR y tanto Nervión como el equipo se vinieron arriba en busca de la victoria. Tanto que el tercero llegaría a los 3 minutos. Centro del Papu medido, dejada de Rakitic de cabeza y remate de Rafa Mir que ponía en júbilo a la grada sevillista. Estaban siendo unos minutos finales frenéticos. El Granada volvió a soltarse pero ya con Papu a los mandos y sus buenas asociaciones con Lamela y Óliver, que entró en los últimos minutos, sentenciaría el resultado. En una contra excelente el delantero argentino iba a rematar un pase raso del extremeño para dejar unos ansiados tres puntos en Nervión. Ya era hora. El Sevilla necesitaba reencontrarse con la victoria y ahora, con el Papu a pleno rendimiento, no piensa frenar. Twitter: DAVID RUIZ @David_ruizm Fotos: QUICO PÉREZ-VENTANA
