El Sevilla FC cayó Vitoria en un mal partido de los de Mendilibar. El conjunto hispalense demostró que necesita fichajes, que defensivamente está lejos de ser competitivo y que hay muchos jugadores que no dan el nivel. El vasco confía en ellos, pero partido tras partido demuestran que no hacen al Sevilla competitivo. Un 0/6 que duele, pero, al menos, aún está a tiempo de fichar.
ALAVÉS: Sivera, Gorosabel, Sedlar, Abqar, Duarte (Marín, minuto 86), Benavidez (Blanco, minuto 79), Guevara, Guridi, Alkain (Javi López, minuto 67), Luis Rioja (De la Fuente, minuto 86) y Kike García (Sylla, minuto 79). SEVILLA FC: Dmitrovic, Jesús Navas, Gudelj, Kike Salas, Acuña (Pedro, minuto 46), Joan Jordán (Tecatito, minuto 75), Rakitic (Fernando, minuto 46), Suso (Rafa Mir, minuto 75), Ocampos (Óliver Torres, minuto 58), Lamela y En-Nesyri. GOLES: 1-0, minuto 7: Luis Rioja. 1-1, minuto 15: Abqar, en propia meta.1-2, minuto 41: Lamela. 2-2, minuto 43: Duarte. 3-2, minuto 54: Kike García.4-2, minuto 58: Kike García. 4-3, minuto 96: Rafa Mir. Árbitro: Cuadra Fernández, madrileño. Amarillas para Gudelj, Gorosabel y Óliver Torres. Incidencias: Estadio de Mendizorroza ante 30.000 espectadores El Number 1 del partido: Lamela Preocupante comienzo liguero del Sevilla, que recuerda al que comenzó la temporada pasada. Tras dos derrotas consecutivas, las alarmas saltan en un club que no da con la tecla, que aún tiene mucho lastre que soltar y al que le crecen los enanos. La Europa League tapó el bosque de inseguridades que transmite el Sevilla, pero tarde o temprano este aflora. Hay mucho jugador que no vale, otros de poco nivel y la necesidad de demasiados refuerzos.
Se comprobó todo ello en la primera mitad y parte de la segunda. El Alavés, que tiene muy poquito, le hizo daño fácilmente. La baja de Badé merma muchísimo el nivel de los centrales y si le sumas que tus escuderos son Jordán y Rakitic, el traje se hace solo. Sin una fortaleza defensiva de nivel, el conjunto babazorro hizo lo que quiso, marcó dos tantos y pudo anotar alguno más. Y eso que el Sevilla, a lomo de sus individualidades, respondió. Con los chispazos de Suso, Ocampos y, sobre todo, Lamela el Sevilla pudo empatar y, posteriormente, remontar el tanto inicial local de Rioja. Pero duraría poco. El Alavés llegaba a la frontal con facilidad y desde lejos del área encontró la portería de un Dmitrovic que, desde luego, no es Bono. La misma sensación de equipo frágil tendría lugar en la segunda mitad, pese a que entró Fernando en el equipo. En apenas 5 minutos Kike García descosió a la defensa sevillista. Quedó señalado Kike Salas, aunque, en realidad, es el que menos culpa tiene de jugar, pues ninguno de los teóricos titulares está disponible. Con 4-2 abajo, el Sevilla bajó los brazos incluso desde el banquillo. Ni Mendilibar confió en la remontada. Cambios extraños, sin minutos para Sow, cuyo fichaje era necesario, y sin visos de dotarle al equipo algo diferente. Entró Mir, que anotó un soberbio golazo para maquillar el marcador. Pero fue un espejismo. El Sevilla volvió a sentirse inferior, como con el Valencia. Un equipo que juega a las tres cartas vuelve a ponerlo en evidencia. Hay mucho trabajo que hacer y mucho que fichar. El tiempo corre en contra de Víctor Orta. Del pasado no se vive, así que, o Mendilibar también se pone las pilas o estará en la rampa de salida. Twitter: DAVID RUIZ @David_ruizm Foto: laliga
