Ha sido la voz más autorizada durante la pasada CAN 2012 para acercarnos un poco más de la selección de Guinea Ecuatorial. Albert es además de comentarista, futbolista y parte de la Nzalang.
Alberto Edjogo Owono ha sido probablemente durante esta CAN 2012 la voz más autorizada para que conociéramos un poco más a la selección de Guinea Ecuatorial, a través de medios tan prestigiosos como Eurosport , Gol Televisión o Radio Marca, nos ha acercado el interior de la Nzalang Nacional. Lo que quizás no todos sepan, es que Alberto es futbolista y partícipe del crecimiento de esta selección. Alberto, tú como otros tantos has nacido y crecido en España. En tu caso te formaste en las categorías inferiores del Sabadell y has desarrollado tu carrera en clubes de Segunda B y Tercera División y actualmente mantienes el tono en UD Vista Alegre de la Primera división catalana. ¿Qué lleva a un joven futbolista a regresar a los orígenes de sus antepasados y buscar la felicidad deportiva a tantos kilómetros de distancia? Recuerdo muy bien el momento en que recibí la llamada para incorporarme a la selección de Guinea Ecuatorial. Tenía 19 años y ya había jugado algunos partidos en 2aB con el C.E. Sabadell. Fue una gran sorpresa para mí y una gran incertidumbre. Fui uno de los primeros en embarcarme en esta aventura antes que algunos de los grandes nombres como Bodipo, Epitié, Benjamín o Juvenal. No lo dudé ni un segundo. La ilusión de enfrentarme a la Marruecos de Naybet, Hadji o Chamack pudo más que cualquier precaución o duda. Las condiciones fueron precarias. Aun así, repetí y repetí. Ya fuese con la selección sub21, olímpica o absoluta. Con la llegada de Gilson Paulo como entrenador y durante las últimas convocatorias en la selección, se podía intuir que tenías difícil entrar en la lista de convocados. ¿Qué supuso para ti quedar fuera de esta lista? Supuso un duro revés. 2 meses antes del inicio de la Copa África participé en la eliminatoria previa para el Mundial de Brasil 2014. El equipo superó a Madagascar y el entonces seleccionador, Henri Michel, me felicitó personalmente por mi actuación. Sabía que, si él seguía, yo iba a estar en esa Copa de África. Sin embargo, las discrepancias con la Federación por la conveniencia de convocar a unos jugadores u otros acabó por romper su contrato. Entonces supe inmediatamente que iba a quedar fuera. Fue un palo al principio, luego me di cuenta de que mis hermanos estaban allí, disfrutando como locos y eso me hizo ver las cosas de otra manera. Desde España les he apoyado como he podido. La Nzalang debutó en Copa África por primera vez en su historia gracias a su condición de anfitriona, ¿qué supuso en un principio compartir cartel con las selecciones más potentes del continente? Algo insólito. Compartir cartel con selecciones y jugadores de tal calibre supuso una inyección de moral para todo el país. Y una manera de decir: ‘Oye, ¿y porqué no podemos competir nosotros con esta gente?’. Los Katongo, Drogba, Gyan, Aubameyang, Chamack, Moussa Sow y compañía estaban allí. Al mismo nivel que los guineanos. Hemos visto durante la competición, un apoyo total por parte del pueblo ecuatoguineano hacia su selección. ¿Qué suponía para el País albergar una competición tan prestigiosa? Siempre digo lo mismo: en África las ofertas de ocio y pasatiempos son muy reducidas. La población tiene muchas carencias de servicios y de lo que se conoce aquí como Estado del Bienestar. El fútbol siempre ha supuesto una manera ‘democratizada’ de expresarse, sentirse importante apoyando desde la grada y una manera de demostrar orgullo nacional. La idea de poner a Guinea Ecuatorial en el mapa a través del fútbol ha sido un gran estímulo. Durante la primera fase de la competición, más allá del gran nivel competitivo que ha demostrado este combinado, la Nzalang mostró un muy buen fútbol, a priori incluso superior al que se le suponía dada la escasa experiencia de la mayoría del plantel. ¿Crees que los jugadores han estado por encima de su nivel personal, o quizás es este su nivel pero internacionalmente aún cuesta apostar por jugadores de Guinea Ecuatorial? Sí, a todos nos ha sorprendido. Incluso a mí, que conozco a todos y cada uno de los componentes de Nzalang. Guinea Ecuatorial, a pesar de su modestia, siempre ha intentado elaborar un fútbol combinativo. Seguramente por esa influencia importada del fútbol español. El resto de equipos africanos (sobretodo los de África Negra) confían mucho en el poderío físico de sus futbolistas. La propuesta guineana sorprendió a muchos y pilló a contrapié, sobretodo, a Senegal en el segundo partido. Para la mayoría de jugadores de Nzalang ha sido un escaparate inmejorable, la oportunidad que han estado esperando toda su carrera. Jugadores de Segunda sin minutos, de Segunda B, o de Tercera y de la Liga local ecuatoguineana necesitaban un trampolín así. Quizá de ahí viene ese rendimiento tan estratosférico. Hace poco tiempo, leí un artículo en el que se destacaba el amor del pueblo por esta Nzalang Nacional, y se hacía referencia a que los más pequeños adornaban las paredes de sus habitaciones con fotos de jugadores de 2ªB o 3ª división que aquí pasan totalmente desapercibidos. ¿A día de hoy qué lugar ocupa el fútbol en esta sociedad? Es muy sorprendente que un niño de 7 años sepa quién eres, en qué equipo juegas, cuántos goles llevas y tenga en las manos una foto tuya imprimida no se sabe muy bien dónde. Todo eso, jugando en el grupo 5 de la 3ª división española. Como he dicho antes, el fútbol democratiza. Todos pueden jugar: pobres, clase media, altos, bajos, flacos, gordos,… Significa una vía de escape a la realidad y el sueño de hacer carrera en Europa. Los jugadores más conocidos o más mediáticos como puedan ser Bodipo, Balboa, Juvenal, Ivan Bolado o Randy han nacido en España. ¿Piensas que en breve podamos ver a un jugador de los llamados importantes, que haya nacido y se haya formado en Guinea Ecuatorial? Hasta hace un lustro, eso era imposible. Por una simple razón: Guinea Ecuatorial carecía de cualquier infraestructura. Ya no sólo deportiva, sino de cualquier tipo. El descubrimiento de yacimientos de petróleo y gas en el Golfo de Guinea han ayudado a mejorar esta situación, estando aún lejos del óptimo. En el aspecto futbolístico es fundamental la figura occidental.
Pero individuos con ganas de otorgar herramientas de mejora, no sacar beneficio económico a corto plazo y marcharse con los bolsillos nuevos. Alguien que ayude a entender los sistemas de trabajo de las grandes canteras del mundo. Este proceso está aún demasiado verde. Es posible que un jugador nacido en Guinea Ecuatorial destaque y se marche a España, pero siempre a una edad prudencial. Es muy importante que los chavales interioricen los conceptos básicos del juego porque, si llegan demasiado mayores a España, ya será demasiado tarde. La colaboración entre Federación Guineana y algunos clubes españoles de acogida está en un momento decisivo. Volviendo al fútbol y a la competición. La selección acabó la primera fase perdiendo contra Zambia, a la postre campeona. Viendo lo que Zambia ha conseguido, ¿supone esto marcharse con un sabor agridulce del campeonato? Sin duda. Estamos todos muy orgullosos del papel de nuestros chicos, pero bien es cierto que nos queda una ‘espinita’ clavada. Un simple empate en el tercer partido de grupos dejaba a Guinea Ecuatorial como cabeza de grupo. Eso habría supuesto enfrentarse a un rival de parecido nivel (Sudán) en la sede más bulliciosa y con un público más entregado (Bata). Sin embargo, la adrenalina soltada en la victoria frente a Senegal hizo que el equipo perdiera ese tono agresivo de los dos primeros partidos. Zambia sin demasiado esfuerzo se llevó el partido y eso nos condenó a enfrentarnos a Costa de Marfil en Malabo, ciudad menos entregada a la selección. Sin embargo sólo las dos finalistas han sido capaces de doblegar a Guinea Ecuatorial. Eso no parece demasiado consuelo. Es cierto que Costa de Marfil, Ghana, Marruecos y Senegal se presentaban como grandes favoritas, pero los nombres no garantizan el triunfo y sí el esfuerzo y el trabajo colectivo. Así lo ha demostrado Zambia. En apenas un mes comienzan de nuevo las eliminatorias para la CAN2013. Supongo que Gilson Paulo mantendrá prácticamente al completo el bloque y por tanto de momento parece difícil tu vuelta a la Nzalang. Es difícil de pronosticar. Gilson Paulo llegó a Guinea con la lista de convocados ya confeccionada de antemano. No conocía a los jugadores. Por un lado, parece que mantendrá el bloque. De otra banda, imagino que tendrá ganas de ver a todos los futbolistas seleccionables. Sobretodo si han dado buen rendimiento en el pasado. Me mantendré a la espera. Sólo puedo seguir haciendo goles en mi club y mantenerme en el grupo de máximos artilleros de la categoría a la espera de que a alguien de allí se le ocurra acordarse de mí y, entonces, ver que mi rendimiento está siendo óptimo. Sin pensar en las eliminatorias del Mundial 2014 donde hay cinco plazas asignadas para el continente Africano y estas parecen estar lejos del alcance. Piensas que este grupo pueda repetir hazaña en la próxima edición, o quizás de momento la principal meta sea clasificarse por méritos propios por primera vez. Hay que mantener los pies en el suelo. Primero hay que saber cuál será nuestro rival en esa eliminatoria a doble partido contra uno de los equipos que disputan la previa (los que no han acudido a la CAN 12 se enfrentan entre ellos). A partir de aquí, ya veremos qué pasa. Más que fijar la vista en los objetivos, debemos centrarnos en seguir evolucionando. Guinea Ecuatorial nunca estuvo peleando por títulos, así que debemos olvidarnos de las prisas y las urgencias porque no las tenemos. Este grupo ha conseguido que se hable de la selección no solo en África, sino que muchos aficionados al fútbol sobretodo en España hayan seguido de mayor o menor modo las evoluciones de la Nzalang, motivo doble de satisfacción para honrar a los antepasados que un día abandonaron aquellas tierras. Ellos, nuestros padres, son quienes más se alegran de nuestros éxitos. Salieron de allí con la idea de dar una vida mejor a sus hijos. No sólo lo han logrado, sino que nos han transmitido un sentimiento muy bonito: el de defender esa tierra que ellos tanto aman y abandonaron por circunstancias desagradables. A nuestra manera, dando patadas a la pelota, lo intentamos lo mejor que sabemos. Podemos deducir por tanto que este grupo con jugadores nacidos en distintos puntos geográficos, más que una selección seáis prácticamente una familia, y que seguramente sea esta situación uno de los puntos fuertes de esta Nzalang Nacional. A pesar de las controversias que ha habido por el origen de unos u otros, allí todos los futbolistas tienen un objetivo común: defender esa camiseta roja hasta el último aliento. Esa unión ha resultado indispensable para lograr el mayor éxito en la historia del fútbol ecuatoguineano: alcanzar los cuartos de final de una CAN. El mismo que nos llevó a la clasificación en Madagascar después de 36 horas de viaje entre vuelos, escalas y esperas en aeropuertos. La unión y la humildad hacen la fuerza. Con vistas al futuro, como se está trabajando en lo futbolístico en el país, es decir, con que medios e infraestructuras se cuenta para desarrollar el fútbol en territorio propio. Como dije antes, se está trabajando en ello. Actualmente, hay dos estadios de primer nivel, una ciudad deportiva, recintos para la práctica del deporte y más accesos para que los niños se desarrollen como futbolistas. No es suficiente con crear infraestructuras, sino que hay que mantenerlas y fomentar su uso con visión a un buen crecimiento y educación de los niños y niñas ecuatoguineanos. Alberto, muchas gracias por acercarnos las sensaciones de una selección y un País con mucho crecimiento por delante y que esperemos nos sigáis enganchando durante mucho tiempo como lo habéis hecho en este mes pasado. Gracias a vosotros amigos de NUMBER 1 Sport. Twitter: @kynette27