El Sevilla FC recibe al Villarreal tras el varapalo de Champions. Nadie en la afición tiene fe en el presente y futuro sevillista y parece que en el club se encomiendan a acertar en un mercado de invierno que será más movido de lo habitual. Económicamente en números rojos, el Sevilla necesita remontar el vuelo para, al menos, seguir en Europa, salir de los puestos bajos en liga y mejorar el rendimiento colectivo.
Estas dos últimas temporadas no están siendo bien dirigidas en el sevillista de a pie. Un sevillista acostumbrado a otros vientos, con plantillas ganadoras y entrenadores poderosos bien gestionados por la directiva y dirección deportiva. Todo parece haberse perdido. Las malas decisiones no dejaron de llegar pese a que hubo alguna que otra que sí permitió volver a ver al Sevilla levantar plata. Pero hoy parece un espejismo. Y lo es porque no parece que en el club se aprenda de los errores. La gestión no puede ser peor para transmitir a la afición optimismo. El resultado ha sido crear un Sevilla débil, roto y que no parece saber cómo remontar. Diego Alonso no da con la tecla, pero continúa; Víctor Orta, hoy por hoy, es solo palabras, no hechos; y Castro y Junior escuchan más las opiniones ajenas que tomar las riendas del club.
Es por eso que nadie sabe cómo volverá el Sevilla a ser lo que fue, al menos, a corto plazo. El Villarreal es un espejo donde podrían mirarse en Nervión: club que, con sus aciertos y errores, ha sabido gestionarse y aprender de sus errores. Vuelve Marcelino al Sánchez Pizjuán, pero no al banquillo donde más de una vez se le ha situado. Le ha dado la vuelta a la situación del submarino amarillo, lo ha sacado a flote. Justo lo que necesita(aba) el Sevilla. Diego Alonso se juega su última bala, no le quedan más oportunidades. Por mucho que los pesos pesados estén con él, no ganar hoy seria su sentencia. Las decisiones que tomará el club a partir de ahí no se conocen, pero deberían estar marcadas en la cúpula hispalense. El Sevilla se juega demasiado en cada partido y la afición no espera otra cosa que ver que su equipo, el menos, tiene pulso. Ganar es la mejor medicina. Twitter: DAVID RUIZ @David_ruizm Foto: QUICO PÉREZ VENTANA @perezventana
