El Sevilla FC venció en Anoeta de forma clara y con un resultado algo reducido para lo que se vio en el encuentro, especialmente en la primera mitad. Carlos Fernández adelantó a los donostiarras, pero en dos minutos Fernando y En Nesyri le dieron la vuelta al marcador. Con la cuarta plaza en el bolsillo, es hora de mirar hacia arriba.
REAL SOCIEDAD: Remiro; Elustondo (Guridi, 75′), Le Normand (Gorosabel, 75′), Zubeldia, Monreal; Oyarzabal (Januzaj, 75′), Zubimendi, Guevara, Barrenetxea (Portu, 83′); Isak, Fernández. SEVILLA FC: Bono; Navas, Koundé, Diego Carlos, Acuña; Fernando, Jordán (Gudelj, 77′), Gómez (Torres, 77′); Suso (Rakitic, 66′), En-Nesyri (De Jong, 90′), Ocampos GOLES: 1-0 M.5 Fernández. 1-1 M.22 Fernando. 1-2 M.24 En-Nesyri. ÁRBITRO: Jaime Latre (madrileño). Mostró tarjeta amarilla a Diego Carlos, Jordán, Barrenetxea, Isak y Carlos Fernández NÚMERO 1 DEL SEVILLA FC: Fernando El Sevilla va en serio. Muchos lo descartan semana tras semana para lo que parece imposible, pero ahí sigue, acumulando victorias y ante rivales de enjundia. Hoy tenía más que tres puntos en juego, pues a falta de 21 puntos por jugarse, sacarle 17 a su perseguidor se antojaba fundamental y decisivo. Lo consiguió. Y lo hizo de forma contundente, demostrando que está a otro nivel y que lo suyo no tiene techo. Carlos Fernández adelantó a la Real casi iniciado el partido en el que sería el único tiro y acercamiento local en toda la primera mitad. Parecía que el encuentro se le iba a atragantar a los hispalenses, pero pronto demostraron que el conformismo no va en su adn. Porque el equipo reaccionó y antes de darle la vuelta al marcador ya avisó con palos y ocasiones cantadas. Atacaba bien, encerraba a la Real y le impedía cualquier contragolpe.
En la siguiente no iba a perdonar Fernando, que se encontraría un rechace tras un cabezazo propio que mandaría a la red. Era un empate justo que recibiría un premio aún mayor tan solo dos minutos después. Un gol con algo de fortuna, pues de nuevo otro rechace tras un disparo de Suso al palo le caería a En Nesyri, quien la empujaría a gol para volver a sumar en su faceta goleadora y remontar el encuentro. El resto de la primera mitad fue un monólogo sevillista. El Papu campó a sus anchas y dirigió todos los ataques hispalenses junto con un Suso muy activo y un Jordán que manejaba la situación a la perfección. Hasta cuatro ocasiones claras tuvieron los visitantes, pero no acabaron en gol. Lo mejor para la Real al descanso era el resultado, que le permitía seguir vivo en los siguientes 45 minutos. Ya la segunda parte fue otra historia, aunque el Sevilla siguió manejando bien la situación. Los de Alguacil adelantaron líneas e impidieron que los ataques hispalenses fueran tan duraderos. Lopetegui lo leyó rápido y reforzó la zona central con Rakitic y Gudelj para intentar conservar el marcador. La Real se iría apagando y aunque tuvo unos buenos minutos finales donde más por empuje que por juego generó peligro, se quedaría ahí. La victoria llena de ilusión y optimismo a una afición que ve como los suyos siguen imparables. La sensación de este Sevilla es que está en el mejor momento y que si no acaba logrando lo utópico es porque los de arriba no van a dejar escapar ni un solo punto. Pero ojo a las relajaciones, que este Sevilla de Lopetegui ya ha cumplido su objetivo. Solo le queda soñar y pelear con lo imposible. Justo lo que más le gusta al club de Nervión. Por : David Ruiz Fotos : SEVILLA FC
