De mal en peor, cuatro palabras para resumir brevemente el mal comienzo del Cajasol en este comienzo de la temporada. Nueva derrota de los de Aíto que mucho deberán cambiar en el futuro.
De mal en peor, así se resume el segundo partido disputado por el Cajasol en la presente temporada. Los de Aíto nunca entraron en el choque matinal y fueron testigos de un recital del Caja Laboral, que no necesitó de su mejor versión para vencer este domingo con una gran ventaja. Los hispalenses salieron a la cancha con la misma intensidad que en el duelo inaugural ante el UCAM Murcia, con la salvedad de que los vitorianos empezaron a sacar grandes distancias desde el primer cuarto. Un parcial de (19-4) hacía presagiar que la reacción obligada delbloque sevillano tendría que esperar una semana más, visto que el Caja Laboral juega adía de hoy en una liga bien distinta. La mala defensa de los sevillanos en los que se salvaba Juanjo Triguero, hizo que se llegara al descanso con una ventaja de 20 puntos para los locales,quienes siempre mantendrían las distancias en el electrónico.
Tras el descanso, las palabras de Aíto parecieron calar en sus jugadores, quienes se pusieron el mono de trabajo y lograron recortar algo las distancias con los triples de Tepic y Bogdanovic, quienes colocaban el (58-42), un mero espejismo de lo que continuaría desarrollándose. De aquí al final no hubo más partido que el que quisieron los vitorianos, quienes sin mucha intensidad supieron aguantar tímidos arreones de la tropa de Aíto. Al final, 20 puntos de diferencia, pero lo más preocupante, una imagen que no mejora y que empieza a alarmar a unos aficionados que para nada andan contentos con su equipo. La próxima cita también será fuera, en este caso ante el Estudiantes, una prueba de fuego para ver si los cajistas van poco a poco formándose como equipo. Twitter: @jesussosky
