Una información de: FERMÍN HEVIA
Alcanzando ya el cénit de la pretemporada del Sevilla Fútbol Club, cargado de ganas de cara al nuevo curso que comienza en poco más de una semana, aún se plantean algunas dudas.
Después de un año atípico, que comenzó con las habituales loas al equipo y la planificación deportiva por parte del máximo dirigente, y acabó con un reconocimiento oficial (porque no quedó más remedio después de la clara evidencia) de que el Club se encontraba en un momento de cambio de ciclo, el Sevilla Fútbol Club se encuentra en ciernes de un temporada que se presenta como ilusionante, algo que no se vivía desde el segundo año de Juande en el banquillo sevillista. No obstante, todo en esta vida es matizable, incluso la excelente gestión de la renovación de la plantilla que se está llevando a cabo por parte de la secretaría técnica.
Según la fuente a la que se consulte, dicha renovación comienza en el mes de Diciembre, con las incorporaciones de Rakitic y Medel (aunque las declaraciones reconociendo el mal desempeño del equipo y el cambio de ciclo llegaron bastante después) o a partir del final de liga 2010/2011, con la venta de Luis Fabiano, las salidas de otros pesos pesados del equipo como Renato y Dragutinovic, y la contratación de un elenco de futbolistas jóvenes, baratos y con hambre. Sea como fuere, el giro en la política de gestión de la plantilla es evidente, con una vuelta al origen que permite a Monchi y el resto de su equipo redimirse de años de malas (y potentes) inversiones en futbolistas mediocres. A pesar de ello, quedan, como decía al inicio, una serie de incógnitas por aclarar; la primera de ellas es la salida de Rodri, canterano con cartel suficiente para obtener una jugosa cantidad, visto cómo está el mercado. Sin embargo, gran parte del sevillismo se cuestiona la idoneidad de esta salida: parece que es evidente que no cuenta para Marcelino este año, porque se lleva negociando varias semanas con clubes que pretenden al futbolista. No obstante, Rodri es, junto con Negredo, el único 9 puro de la plantilla. La justificación de una cesión o traspaso para que tenga minutos fuera pierde bastante fuerza porque, aunque Kanouté sigue siendo el mejor delantero del Sevilla Fútbol Club, tiene limitaciones físicas que cada año son más evidentes y que hacen que pueda estar para 1 partido de cada 3.
Si el Sevilla se encuentra en una tesitura como la del trofeo Antonio Puerta, en la que Negredo se lesionó al poco de iniciarse el partido, la figura de un 9 se hace más que necesaria. Si el año pasado y el anterior hubo sitio para Luis Fabiano, Negredo y Kanouté, ¿por qué no hay sitio para Rodri? Monchi debería recordar la temporada 2008/2009 en la que, por lesiones y competiciones internacionales, hubo momentos en los que el Sevilla se encontró, literalmente, sin delanteros puros. La segunda incógnita se colige de la primera: Giovani Dos Santos, un mediapunta más para la plantilla. El mexicano es la primera (y muy probablemente única) opción que maneja Marcelino, que lo ha pedido por activa y por pasiva, y que llegará al Club casi con total seguridad tras su reciente convocatoria internacional. No obstante, la petición expresa del míster, deja entrever que Gio será titular en un gran número de partidos, además jugando como segundo delantero. ¿Qué sistema utilizará entonces el Sevilla? Si juega con su tradicional 4-4-2, parecería un sinsentido la masificación de mediapuntas que tiene la plantilla para cubrir 1 o 2 puestos (extremo izquierdo y segundo delantero, considerándose a Navas intocable): Negredo, Kanouté, Luis Alberto, Manu del Moral, Perotti, Armenteros, Trochowski y Gio. ¿Es necesario entonces traer a Gio tienendo ya a 5 mediapuntas, 4 de ellos novedades este año? ¿Alguien se atrevería a romper la dupla Negredo-Kanouté si ambos están en plenitud física?
Parecería mucho más probable que Marcelino se decantase por un 4-3-3 o un 4-3-2-1, pero en ambos casos sigue pareciendo excesiva la masificación de segundos puntas en el equipo. Parecería entonces mucho más lógico haber buscado la salida de canteranos que, a priori, parece que tendrán pocos minutos como Luis Alberto y Armenteros, que la de Rodri, por ejemplo. En cualquier caso, Marcelino está configurando un bloque sólido en defensa, solidario y comprometido, que ha dejado retazos de muy buen fútbol en pretemporada. Lo bueno empieza la próxima semana. La misma semana en la que todos los puntos pendientes quedarán cerrados.
