El Sevilla FC empató en Mallorca con polémica arbitral. El colegiado anuló a instancias del VAR un gol de Ocampos en el 95 por mano previa de Fernando. Una mano interpretada como voluntaria que evitó la legalidad del gol, y, por tanto, la victoria hispalense. Fue mejor el Mallorca en líneas generales, pero el Sevilla acabó teniendo las mejores oportunidades.
MALLORCA: Reina; Maffeo, Valjent, Russo, Oliván; Ruiz de Galarreta (Salva Sevilla 78′), Baba, Antonio Sánchez (Sedlar 71′), Dani Rodríguez (Joan Sastre 90′); Ángel (Fer Niño 78′) y Amath (Jaume Costa 78′) SEVILLA FC: Bono; Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos, Acuña (Ocampos 46′); Fernando, Joan Jordán (Rakitic 82′), Óliver Torres (Delaney 53′); Suso (Lamela 53′), Munir (Augustinsson 53′) y Rafa Mir. GOLES: 1-0(22′) Antonio Sánchez; 1-1 (73′) Lamela. ÁRBITRO: Jaime Latre (Aragonés). Amonestó a los mallorquines Antonio Sánchez, Reina y Brian Oliván; y a los sevillistas Acuña, Delaney, Lamela, Fernando y Munir. Expulsó, con roja directa, al local Jaume Costa (90’+). INCIDENCIAS: Estadio de Son Moix NUMBER 1 DEL SEVILLA: Lamela Al Sevilla se le está poniendo una cara preocupante lejos de Nervión. Son ya muchos los encuentros en los que el rival le domina y que incluso merece más y hoy, al menos en la primera parte, se repitió el guión. El Mallorca contuvo muy bien a un conjunto de Lopetegui más atrevido que en otros encuentros en los que actuó como visitante e incluso se llegó a adelantar. Un gol precedido de cierta pasividad defensiva que cabreaba mucho al banquillo sevillista. Especialmente por Lopetegui veía que su equipo hacía aguas tras pérdida y sufría mucho en salida de balón. El Mallorca llegó con mucho peligro y los hispalenses apenas inquietaron la meta de Reina a partir de los primeros 10 minutos de juego. Se llegó al descanso con un marcador ajustado, pero los locales hicieron méritos para abrir aún más brecha en el marcador de Son Moix.
El técnico sevillista introdujo a Ocampos por un desdibujado Acuña en la segunda mitad y pasó a un sistema de tres centrales que no funcionó. El Mallorca se acercó con aún más peligro, lo que hizo que diera entrada de una tacada a Augustinsson, Lamela y Delaney. Se volvió al 4-3-3 y el Sevilla mejoró. Las ocasiones empezaron a llegar, de hecho, el empate se rondó en varias ocasiones. Primero con un disparo de Rafa Mir que daría en el palo y posteriormente con un cabezazo de Ocampos que no terminaría entrando. Eran minutos de duda en el Mallorca que aprovechó bien el Sevilla, especialmente Lamela, que se iba a sacar un excelente golpeo de zurda que ponía las tablas en el marcador en el minuto 73. Quedaban 20 para el final, pero el equipo de Lopetegui se fue desinflando. Los locales no se vinieron abajo e intentaron la victoria, lo que provocaría cierta igualdad en la que ningún equipo conseguía imponerse sobre el otro. Cuando ya parecía que moriría el encuentro, en el 95, Ocampos iba a marcar tras un pase de Fernando, pero el gol iba a ser anulado. El asombro de los jugadores hispalenses fue total. El VAR mandó revisar la jugada y Jaime Latre decidió anularlo tras ver manos del jugador brasileño. El problema está en el carácter interpretativo de la jugada. Fernando toca con los dedos de las manos la pelota, pero este año la norma cambió para evitar que cualquier mano fuese penalti. Por tanto, lo único que Jaime Latre entendió es que ese roce con los dedos era voluntario y determinante para la jugada. Perjudicado el Sevilla por la decisión, que ve volar dos puntos que no se le podían escapar. Lejos de Nervión, no levanta cabeza. Twitter: DAVID RUIZ @DavidRM19 Foto: SEVILLA FC
