La soledad de Iker Casillas

Escrito por José Miguel Muñoz. Creado en Más Fútbol, Nuestros números 1, Number1 opina

Tagged: , , , , , , , , , , , ,

Iker Casillas Foto Sportyou

España se estrena en la Eurocopa de 2016 en Francia con una imagen que llama poderosamente la atención. En la portería española, no está, por primera vez después de 14 años… San Iker Casillas.

Spain is different, para lo bueno para lo malo. Un país tan especial y acogedor, como capaz de subir a lo más alto a sus ídolos para posteriormente intentar derribarlos y disfrutar con su caída. Ocurrió con otro guardameta grande, Luis Arconada, y el efecto ‘De Ángel a Demonio’ le toca vivirlo ahora en primera persona a Iker Casillas, ese niño hecho hombre, que un día nos hizo campeones de Europa y del Mundo.

Porque en unos días en los que todo el mundo habla de Iniesta, otro grande de nuestro fútbol, yo prefiero centrarme en Iker Casillas, quizás por aquello de haber sido también portero, o por aquello de que esto ya lo viví siendo más joven con mi ídolo Arconada, tras aquella Eurocopa, curiosamente en Francia, donde muchos aprovecharon para intentar tirar (sin suerte) del pedestal, la grandeza de aquel portero donostiarra que nos enseñó que el hombre también podía volar.

La historia tiene ahora otro protagonista, también portero, de nombre Iker, y de apellidos Casillas Fernández, aquel crío que un día recibió una llamada al colegio para que abandonar el mismo de forma urgente porque tenía que viajar con el primer equipo del real Madrid a un partido de Champions por lesión de un compañero. El mismo niño, al que siendo portero del primer plantel blanco no se le caían los anillos viajando en el Metro mientras que sus compañeros lo hacían en Ferrari, Porsche, y coches de lujo.

Humilde, sereno, respetuoso, educado, tanto antes cuando era titular indiscutible, como ahora, que por primera vez desde aquel 2 de junio de 2002 en un Eslovenia-España correspondiente al Mundial de Cora y Japón, sustituyó a Santi Cañizares. Desde aquella fecha grabada en el calendario de los Casillas, Iker siempre había sido titular.

Su envidiable curriculum con la selección española de fútbol está ahí: un Mundial (2010), dos Eurocopas (2008 y 2012) y un Mundial Sub-20 en Nigeria, cifras al alcance de muy pocos, siendo el segundo jugador del mundo con más partidos con su selección, además del jugador con más partidos con España, tras desbancar con sus impresionantes números a todos los que estuvieron por delante, y manteniendo un registro de menos de un gol por partido.

Un total de 167 partidos internacionales con la selección y con un amplía distancia sobre Sergio Ramos, el jugador que le sigue tras igualar a Xavi Hernández. Siempre en primera línea de batalla, logrando al igual que nuestro ídolo, Arconada, algo muy complicado: ser ídolo en España jugando de portero. Siendo el encargado de impedir la salsa del fútbol… ¡Los goles!

Porque Iker, San Iker Casillas, es el mejor ejemplo para nuestros hijos, para todos esos niños que hoy sueñan con ser como él. La frase de mi hijo Iker antes del partido de España ante la República Checa al enterarse de que De Gea sería titular en detrimento de Casillas, me puso la piel de gallina: «Papá, aunque De Gea sea titular hoy, nosotros seguimos siendo de Casillas. Ahora es Iker el que nos necesita».

Porque amigo Iker Casillas no estás solo. Nadie ha olvidado, al menos nadie de los que merecen la pena y respetan tu trabajo, todo lo bueno que durante estos catorce años le has dado a la selección, a esa España tuya, esa España nuestra. Muchos hablan de Sergio Ramos, del gol de Iniesta, el de Fernando Torres… otros nos quedamos con tus paradas, esas que permitieron que España fuera campeona de de Europa dos veces y una vez campeón del Mundo.

Esas manos, y esa pierna milagrosa ante la desesperada salida ante el holandés Robben, que hizo a España aún más grande naciendo a renglón seguido la Leyenda de San Iker Casillas. Esas paradas, esas manos, esas intervenciones del 1 de España, que llevaron a la selección a lo más alto. En el recuerdo, siempre estará esa imagen de Iker Casillas, aquel niño de Móstoles, levantando esa Copa del Mundo que sólo han podido alzar al Cielo los dioses de este bendito deporte llamado fútbol.

Todo el mundo estaba pendiente de ti en el banquillo, pese a estar ahí, seguías siendo protagonismo. Y con tu humildad y compañerismo volviste a tapar bocas, porque en la portería o en el banco tu objetivo sigue siendo el mismo, España, por encima de nombres propios. Esa imagen final, saludando a cada uno de tus compañeros, hizo que una vez más me rindiera a tu señorío: Don Iker Casillas Fernández.

Padre, hijo, marido, compañero, amigo… pero por encima de todo, humilde, bandera que te ha hecho ser grande, muy grande, en el banquillo o en el terreno de juego, con esa soledad que sólo entendemos aquellos que sabemos como siente un portero. ¡Grande Iker!

JOSÉ MIGUEL MUÑOZ @tara11iker

Foto: Sportyou y Futbol Primera.es

Iker Mundial Foto Futbolprimera