El regreso más deseado de Rubén Castro

Escrito por José Miguel Muñoz. Creado en Number1 opina, Real Betis

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Lo había soñado pero no podía imaginar en esos sueños que saldría redonda su vuelta al Real Betis como futbolista profesional tras su cesión en el fútbol chino. Rubén Castro regresó… marcando.

Tenía ganas de volver a vestirse de corto con la camiseta del Real Betis. Lo deseaba pero no quería que las ganas le pudieran. Esas ganas le hizo sufrir más de la cuenta en el derbi porque querían poner su granito de arena en tan histórica victoria, y más teniendo en cuenta el tiempo que ha vivido los toros desde el otro lado de la barrera, en el campo y sufriendo.

Ahora llegaba la oportunidad de regresar como más le gusta: ante su afición. Ante esa afición del Real Betis que le quiere y le respeta. Esa afición que sabe de su buen hacer y de todo lo bueno que le ha dado durante todos estos años en el equipo verdiblanco, haciendo goles, que es lo que mejor sabe hacer, tanto en Primera como cuando hizo falta tirar del carro en Segunda para devolver al equipo verdiblanco entre los mejores de nuestro fútbol.

Y llegó el momento deseado, el momento de saltar a la cancha, sustituyendo al que ha sido referente junto a Sanabria en el ataque bético. Y lo hizo como siempre, avisando en la primera que tuvo, con ese gol que se cantó en el Benito Villamarín pero que no llegó a hacerse realidad. Pero era cuestión de tiempo, ya que escasamente unos minutos más tarde llegaba la suya en un claro penalti para el que con 2-2 en el marcador había que tirar de experiencia y… testiculina.

En esos momentos, el canario, se muestra como pez en el agua. Frío, sereno, tranquilo, aunque evidentemente la profesión va por dentro y en la cabeza siempre se le da vueltas a que ese penalti puede llevarte a la gloria al ser el gol del triunfo, o empañar un regreso soñado y esperado por todos. No faltó ni incertidumbre, para que el momento fuera completo, con el juego psicológico del meta del Leganés Cuéllar que quiso ponerle nervioso al recordarle lo que tenía entre manos.

Pero Rubén es mucho Rubén. Cogió el balón, miró al meta pepinero y golpeó con confianza el balón, sin ajustarlo como en otras ocasiones, pero haciendo insuficiente la buena estirada de Pichu Cuéllar que se convierte en testigo de excepción en el regreso más soñado del delantero canario. El balón entra en la meta del Leganés y el beticismo explota con el feliz final de un partido sufrido. No olvidemos que del dos a cero inicial se pasó al empate a dos…

El Real Betis ganaba y alargaba la euforia que tanto temía Quique Setién en la víspera del partido por aquello de que el sabor a derbi se alargara de forma negativa con un exceso de relajación. No fue así, el Betis sumaba tres puntos importantísimos y se coloca, pese a la irregularidad de toda la temporada, con 27 puntos, a sólo dos del Sevilla FC, o lo que es lo mismo, a puertas de la Europa League. El beticismo vive su mejor momento. Y Rubén Castro, su regreso soñado…

Texto: JOSÉ MIGUEL MUÑOZ @tara11iker

Foto: JOSÉ EMILIO GÓMEZ @JoseEmilioGomez