Cordialidad… por la buena salud de España

Escrito por José Miguel Muñoz. Creado en Más Fútbol

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La salud de España es buena, en lo futbolístico claro. La llamada del capitán Iker Casillas a su compañero de selección Xavi sirvió para limar asperezas tras la tensión acumulada en los clásicos.

Las polémicas vividas en los clásicos entre Real Madrid y Barcelona habían dejado demasiada tensión, más de la cuenta para una concentración de una selección campeona del mundo y de Europa que necesita vivir un ambiente normal entre compañeros. Los roces entre rivales y compañeros de selección que han levantado los dos títulos más importantes del fútbol nacional habían dejado una situación cuanto menos preocupante como reconoció el propio seleccionador Vicente Del Bosque.

Iker Casillas, capitán del Real Madrid y del combinado nacional lo sabe. Es consciente de que esta situación no hace ningún bien a nadie; ni a madridistas ni a barcelonistas, y lo más importante para el fútbol español y lo que está por encima de todo ello, la selección: España. Por ello Casillas no dudó en hacer una llamada a su homónimo azulgrana para limar asperezas. Han sido muchos años como compañeros en la selección, desde categorías inferiores para dejar este tema enfriar.

La llamada de Iker cuentan algunos que no sentó bien a su entrenador Jose Mourinho, algo que el propio técnico portugués desmintió. Ahora, ya en la concentración española, Xavi Hernández habló sobre todo lo vivido. «Las cosas se hablan como ha pasado en todas las concentraciones. Nunca ha habido un problemón por el tema de los clásicos como para sacar las cosas de su sitio y sino para eso está el seleccionador que sabe llevar el grupo perfectamente».

El capitán azulgrana añadió que «somos gente a la que le gusta el fútbol, el buen rollo y el buen ambiente». Xavi fue también preguntado por la famosa llamada de Casillas: «Me ha llamado como me llamó en otras ocasiones para felicitarme. Nos hablamos por teléfono y nos mandamos mensajes, como es normal por la relación que tenemos desde 1997 que somos compañeros en las categorías inferiores de la selección. No hay grieta, somos un grupo muy bueno de gente y todos remamos por el bien del fútbol español». Y sentenció: «Queremos que el fútbol español tenga salud».